Arrestado por fraude empleado de la fiscalía de Miami-Dade

Según precisa el documento, las responsabilidades oficiales de Kessler incluían brindar asistencia a las personas al pagar infracciones de tránsito y otros pagos judiciales y obligatorios, así como ayudar a establecer planes de pago en su intento de satisfacer el dinero adeudado con la corte.

Luego de que cinco personas, que habían pagado el total de sus multas de tránsito en efectivo, comenzaron a recibir avisos que debían completar un plan de pago, notificaron al Secretario de los Tribunales y esto llevó al Departamento de Policía de Miami-Dade a ejecutar una operación encubierta que condujo al arresto de Kessler en el Centro de Justicia de North Dade. En la actualidad, el monto del presunto robo asciende a entre $4.000 a $5.000, se lee en el comunicado.

Scott Kessler está siendo acusado de:

• 1 cargo: conspiración para cometer un esquema organizado para defraudar: delito grave de tercer grado
• 1 cargo: mala conducta oficial, delito grave de tercer grado
• 1 cargo: hurto mayor: delito grave de tercer grado

De acuerdo con la fiscal estatal Katherine Fernandez Rundle, cuando los empleados del gobierno roban, no solo se apoderan del dinero del público, sino que echan por la borda la confianza en su gobierno local. “Tales acciones traicionan nuestra comunidad y nunca pueden ser aceptadas o toleradas”, dijo y amplió que ella y su equipo continúan “comprometidos con la eliminación de cualquier actividad potencial de este tipo en nuestro sistema judicial o cualquier otra parte de la actividad gubernamental”.

Por su parte, el director del Departamento de Policía de Miami-Dade, Alfredo Ramírez, valoró: “Es responsabilidad de nuestra Unidad de Corrupción Pública investigar cualquier conducta delictiva que involucre a un empleado del condado de Miami-Dade’ (...) Nosotros valoramos la confianza de nuestra comunidad, y nos comprometemos a realizar una investigación exhaustiva de todos los casos para garantizar que no pongan en peligro la confianza de la comunidad”.

En esa línea, el Secretario de los Tribunales de Dade, Luis G. Montaldo, reveló que siempre le entristece escuchar cuando alguien viola su posición de confianza y autoridad. “Es por eso que, cuando me enteré por primera vez del robo, instruí al personal del secretario para que se comunicara y cooperara con la oficina del fiscal estatal y la policía de Miami-Dade en la investigación del departamento. La confianza del público es crucial para la función de la oficina del secretario, y cualquier persona que erosiona esa confianza por el robo, debe responder a la aplicación de la ley. Quiero agradecer a mis compañeros por su exhaustiva investigación que resultó en este arresto”.