Cumplir deseos: ¿Es bueno que los padres ahorren para sus hijos? Cuanto más crecen los niños, más grandes se vuelven sus deseos. Muchos padres se ven ante una verdadera encrucijada, porque no saben cómo manejar económicamente los pedidos de los adolescentes, que ven que otros tienen tal o cual cosa y también la quieren.
El modo de manejar este tipo de pedidos o deseos es muy personal, por supuesto. Varía de familia en familia y está intrínsecamente ligado a cómo se quiere educar a los niños.
Una posibilidad es ayudarlos a ahorrar, enseñarles a hacerlo. Una muy buena motivación es definir claramente para qué se está ahorrando. "Ponerse un objetivo es fundamental", dice Niels Nauhauser. Por ejemplo, si el niño quiere una bicicleta, uno lo puede ayudar ahorrando en una alcancía o incluso en una caja de ahorro si ya tiene edad.
Si lo que uno quiere es apartar dinero que pueda servir como respaldo cuando los jóvenes estudien, seguramente lo mejor será abrir un plazo fijo, que también dará algo más de interés.
Pareciera ser algo imposible, destinado sólo a quien puede ahorrar grandes cifras, pero no tiene por qué ser así. Más vale averiguar cuáles son los montos mínimos en su entidad bancaria de confianza, pero muchas veces se puede abrir una cuenta con una suma reducida. De hecho una opción es ir colocando en esa cuenta "el dinero de la semana" que se le entrega muchas veces al niño y que él, con el tiempo, vea que pueda acceder a algo mayor de lo que habría podido gastando las sumas en el momento.
En algunos países se paga un subsidio por hijo del que también se aparta lo que se puede para ir construyendo un ahorro a futuro.
Ahora bien, si usted elige un plazo fijo, debe tener muy presente los diferentes niveles de riesgo que se ofrecen, porque los valores en la Bolsa suelen experimentar muchas fluctuaciones y no todos están dispuestos a soportar esos vaivenes, sobre todo cuando se trata de ahorros conseguidos con mucho esfuerzo.
Otra variable a tener en cuenta es el lapso de tiempo en el que uno puede dejar el dinero en el plazo fijo. Cuanto más tiempo, mayor es la chance de que el resultado sea bastante positivo si se lo coloca en acciones. Pero, como en todos los temas serios, lo fundamental es estar bien asesorado.
Tal vez los niños no deban estar al tanto de absolutamente todo desde pequeños, pero no está mal irlos introduciendo al mundo bancario poco a poco, porque a la larga será algo que, si pueden ahorrar, deberán saber manejar.
FUENTE: DPA