NUEVA YORK.- Es la pregunta clave de la defensa en el juicio por violación de Harvey Weinstein: si es un monstruo tan grande, ¿por qué algunas de sus acusadoras mantuvieron contacto amigable con él años después de los presuntos ataques?
NUEVA YORK.- Es la pregunta clave de la defensa en el juicio por violación de Harvey Weinstein: si es un monstruo tan grande, ¿por qué algunas de sus acusadoras mantuvieron contacto amigable con él años después de los presuntos ataques?
Los fiscales buscaron darles a los jurados algunas respuestas el viernes al llamar al estrado a una psiquiatra forense que rindió declaración sobre el mismo tema en el juicio en Pennsylvania que llevó a la condena de Bill Cosby por abuso sexual en 2018.
La doctora Barbara Ziv dijo a los siete hombres y cinco miembros del jurado en el caso de Weinstein que la mayoría de las víctimas de abuso sexual continúan teniendo contacto con sus agresores, que a menudo amenazan con tomar represalias si le cuentan lo ocurrido a alguien.
Las víctimas “esperan que esto sea sólo una aberración”, explicó, y se dicen a sí mismas: "'Puedo poner esto en una caja y olvidarlo. No quiero que esto empeore. … Puedo manejar este trauma físico, pero Dios no quiera que arruine el resto de mi vida'”.
Las víctimas pueden terminar culpándose a sí mismas “sin saber que su comportamiento es completamente normal”, dijo Ziv, quien se ha descrito como una experta en “conducta de víctimas de abuso sexual" que ha evaluado a más de 1.000 de estas.
No evaluó, sin embargo, a ninguna de las acusadoras de Weinstein, un punto que sus abogados subrayaron.
También ofrecieron una explicación diferente al contacto de las mujeres con el exmagnate de Hollywood tras los presuntos ataques. En sus argumentos de apertura esta semana, el abogado de Weinstein Damon Cheronis se enfocó en un mensaje de una mujer que le dijo a Weinstein que lo amaba y que quería que conociera a su madre.
"Damas y caballeros, así no es como uno le habla a su depredador", dijo Cheronis.
Weinstein, exjefe de un estudio de cine cuya caída impulsó el movimiento #MeToo, está acusado de realizarle sexo oral por la fuerza a la asistente de producción Mimi Haleyi en el apartamento de él en Nueva York en 2006 y de violar a una aspirante a actriz en un cuarto de hotel en Nueva York en 2013.
El productor de 67 años de películas ganadoras del Oscar como “Chicago” y “The King's Speech” (“El discurso del rey”) ha insistido en que todos sus encuentros sexuales fueron consensuales. Podría ser sentenciado a cadena perpetua de ser declarado culpable.
La sesión del jueves en la corte fue consumida por el testimonio de la actriz Annabella Sciorra de que Weinstein la subyugó y la violó tras entrar por la fuerza a su apartamento en Nueva York en 1993 o 1994.
Los abogados de Weinstein sacaron partido de sus acciones tras el presunto ataque. La abogada defensora Donna Rotunno cuestinó por qué Sciorra hizo la película de 1997 producida por Weinstein “Cop Land" (“Tierra de policías”) si él la había violado unos años antes.
Sciorra, ahora de 59 años, dijo que sólo se enteró de que Weinstein estaba involucrado con el filme cuando ya había aceptado aparecer en el mismo.
FUENTE: AP