El 2018 está prácticamente de salida, en el invierno del calendario, en un año que ha dejado eventos deportivos importantes en la ciudad de Miami. Fue un año de cambios, de transiciones y de anuncios, como la aprobación, finalmente, del equipo de fútbol de la MLS de David Beckham en la ciudad.
Este año también significó el retorno a la ciudad del atleta más exitoso en su historia, Dwyane Wade, quien volvió al Heat y ahora se encuentra en pleno proceso de despedida de los tabloncillos de la NBA.
El béisbol, quizás el deporte más popular entre los aficionados latinos de la ciudad, vio cómo los Marlins de Miami terminaron con el tercer peor récord en la historia de la franquicia, tras la salida de sus principales figuras como Giancarlo Stanton y Christian Yelich, quien por cierto en su primera contienda con los Cerveceros de Milwaukee terminó siendo elegido como el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.
No hubo en general triunfos para Miami. El 2018, sin dudas, pasará como un año de transición, e incluso pudiera convertirse en el nuevo punto de partida para los mismos Marlins y sin dudas para el equipo de fútbol.
Todo nuevo
Tras la adquisición del nuevo grupo, que encabeza en términos de imagen pública Derek Jeter, los Marlins de Miami vivieron una campaña complicada en 2018. Fue una temporada de cambios, de rostros nuevos, de ver cómo otros “tradicionales” del club se iban a otros lugares como Giancarlo Stanton, quien disparó 38 jonrones y fletó 100 con los Yankees y como Christian Yelich, quien lideró la Nacional en OPS, slugging y bateo con 1000, .598 y .326 respectivamente para convertirse en el Jugador Más Valioso.
La ausencia de ambos se hizo sentir. Miami fue el equipo con la peor ofensiva en las Mayores con 589 carreras anotadas y un OPS colectivo de .659, las cifras más bajas en la gran carpa.
El pitcheo fue el peor de la Liga Nacional con efectividad de 4.76.
Pero más allá de todo, los Marlins produjeron más noticias fuera que dentro del terreno. La nueva gerencia tomó el 2018 como el puerto de embarque para dejar atrás todo lo que representó la administración anterior. En noviembre pasado se develó el nuevo logo y los nuevos colores del equipo y para completar, Jeter decidió ejecutar el retiro del controversial monumento del jardín central y que fue catalogado por Jeffrey Loria, el anterior dueño, como una obra de arte.
Para 2019, los peces tampoco van con muchas aspiraciones en el terreno. Pero dentro de los corrillos del equipo existe la sensación de que, por primera vez en mucho tiempo, la organización parece encaminada por la vía correcta. Sólo el tiempo dirá si esto es cierto.
Por fin habrá fútbol
Después de varios intentos infructuosos, Miami puede decir que tendrá fútbol. Y todo fue posible en 2018. El 29 de enero, la MLS finalmente aprobó la franquicia que encabeza David Beckham.
El ex futbolista británico tenía varios años intentando convencer a los líderes de la ciudad para tratar de concretar su proyecto en la ciudad. Sin un respaldo de Miami, la MLS había mostrado aprehensión, hasta que finalmente las piezas del rompecabezas calzaron.
El 5 de septiembre, Beckham dio a conocer el nombre oficial del equipo, Inter Miami FC, así como el logo con un estilo de art deco tradicional de la ciudad.
Pero las buenas noticias para Beckham no terminaron ahí.
En noviembre se aprobó, mediante una votación popular, que se utilizara un terreno antes destinado para un campo de golf como el lugar donde se construirá el estadio para el Inter Miami, y que se llamará Miami Freedom Park con una capacidad para 25,000 personas.
El conjunto hará su debut en la MLS en 2020 incrementando de esta forma el número de franquicias a 24, aunque se espera que sea para el año siguiente cuando pueda mudarse a su propio estadio.
El retorno del hijo pródigo
En febrero de 2018, Dwyane Wade, el atleta más exitoso en la historia de Miami, regresó al Heat, el equipo donde brilló. Wade no sólo aportó su experiencia y veteranía, sino también mostró las ráfagas de talento que le permitieron al Heat volver a la postemporada después de quedar eliminado en la campaña anterior. El sueño de los playoffs duró poco, sin embargo, con una sobresaliente actuación de los Sixers de Filadelfia que vencieron 4-1 en la serie a Miami. Wade, por cierto, fue líder anotador en dos de los cinco choques de ese enfrentamiento.
Para la actual contienda, Miami ha tenido unos cuantos altibajos, con algunos problemas defensivos y se ha mantenido en la mitad de la tabla de la Conferencia Este. Con la despedida, en esta campaña de Wade, el equipo intenta dar el paso definitivo hacia una transición juvenil que, sin embargo, todavía no parece rendir frutos.
El adiós de una institución
Los cambios también llegaron al tenis, en este caso al Abierto de Miami, uno de los torneos más importantes del mundo. En 2018 se jugó por última vez en Key Biscayne, el tradicional sitio en el que se había realizado en los últimos 32 años.
Por Key Biscayne pasaron las máximas glorias de este deporte desde Pete Sampras y Andre Agassi un poco más atrás, hasta Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic en el lado masculino, así como Martina Navratilova, Chris Evert, Steffi Graff, las hermanas Venus y Serena Williams, entre otras.
Quedarán para el recuerdo, en el estadio del Crandon Park, las grandes veladas latinoamericanas, especialmente de los argentinos apoyados enormemente por los aficionados. Ahí ganó Gabriela Sabatini, y ahí vivieron grandes jornadas Guillermo Coria y Guillermo Cañas -que alcanzaron la final sin éxito- así como Juan Martín del Potro y David Nalbandian, entre otros.
En su última edición en Key Biscayne, se impusieron los estadounidenses John Isner y Sloane Stephens.
Ahora, para 2019, el torneo se mudará al Hard Rock Stadium, casa de los Dolphins de Miami de la NFL. Esta nueva instalación contará con 30 canchas y para la primera edición se jugará desde el 18 al 31 de marzo próximos.
Otros eventos
*Dolphins de Miami: El equipo está luchando por la posibilidad de lograr su pase a los playoffs. Entre su accionar más recordado de 2018 sin dudas se incluirá la victoria del domingo 9 de diciembre sobre los Patriots de Nueva Inglaterra.
*Boxeo: Para los boxeadores cubanos radicados en la ciudad, el 2018, fue un poco complicado. Guillermo Rigondeaux no subió al ring, en una suerte de semi-retiro tras su revés ante Vasyl Lomachenko en diciembre del año pasado. El cubano parece haber desaparecido del mapa boxístico. El peso pesado Luis Ortiz estuvo a punto de dar la gran campanada en marzo cuando puso en problemas a Deontay Wilder en una refriega por el título mundial. El cubano no pudo concretar y el estadounidense vino de atrás para noquearlo en el décimo asalto. Desde entonces, Ortiz sumó dos nuevas victorias, pero se desconoce si volverá a tener una oportunidad como la de marzo pasado. Yurioris Gamboa, entretanto, peleó y venció en noviembre en Miami a Miguel Beltrán Jr.
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