Prácticamente descartado de la lucha por la Liga española de fútbol, el Real Madrid regresa el domingo a la competición doméstica frente a Las Palmas con el objetivo de confirmar su recuperación futbolística después de que el Atlético de Madrid lo apartara de la pelea con el Barcelona.
Mientras los azulgrana comandan el campeonato a ritmo de récord y en busca del título, los dirigidos por el francés Zinedine Zidane tratan de prepararse en la Liga para lo que les aguarda en la Liga de Campeones europea, su gran y prácticamente único objetivo actualmente.
La distancia de los blancos respecto al Barcelona es tan amplia (12 puntos, a la espera de lo que los de Luis Enrique hagan el sáado ante el Getafe) que cualquier otro objetivo que no sea la segunda plaza -el Atlético cuenta con cuatro unidades de ventaja- resulta casi ilusorio.
La derrota frente al Atlético en el clásico de la capital española, no obstante, marcó un punto de inflexión para un Real Madrid que, desde entonces, ha mejorado su imagen con tres triunfos consecutivos (Levante, Celta y Roma) y un fútbol, por momentos, muy efectivo.
"Cuando ganas, siempre te sientes mejor. El ambiente y los entrenamientos son mejores", constató Zidane. "Pero ahora tenemos que seguir adelante porque los partidos van a ser cada vez más difíciles".
Partido a partido, como no se cansa de repetir, el técnico francés trata de perfilar un equipo capaz de alargar la temporada en la máxima competición europea.
Y para ello, necesita que sus hombres sean capaces de actuar lejos del Santiago Bernabéu con la solvencia que demuestran en su estadio.
Tras dos empates y dos victorias nada holgadas a domicilio, Zidane espera que el buen momento del portugués Cristiano Ronaldo -máximo goleador de la Liga con 27 tantos- arrastre al equipo también ante Las Palmas, que encadenó tres victorias tras caer con el Barcelona.
"Estamos en un buen momento, pero eso no significa nada", aseguró Zidane. "Sabemos que vamos a tener un partido complicado porque ellos van a intentar molestar al Madrid", prosiguió, sin ofrecer más argumentos futbolísticos.
Los de su equipo deberán ofrecer algo parecido a lo que se vio en la segunda parte frente al Celta en la pasada fecha (7-1) para superar a Las Palmas, que, con un fútbol ofensivo y bien construido, lucha por prolongar la racha que le apartó de los puestos de peligro.
Será, sin embargo, con un equipo diferente al que formó ante el Celta, pues Zidane anunció hoy cambios en su once, sin avanzar quién descansará y quién tomará el relevo.
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