LONDRES.- Después de alcanzar la cima del ránking mundial por primera vez en su carrera, el británico Andy Murray ya está pensando junto a su equipo en la manera de sostenerlo en el tiempo, incluso antes del inicio del Masters de Londres, donde se presentará como máximo favorito.
Por primera vez desde que lo hiciera en el Abierto de Estados Unidos, Murray volverá a reunirse con Ivan Lendl, su entrenador a tiempo incompleto, aunque mal no le fue sin el exnúmero uno del mundo: el británico ganó los cuatro torneos que disputó -Pekín, Shanghái, Viena y París-Bercy- y desplazó a Novak Djokovic como mejor jugador del ránking mundial.
Después de su triunfo en París, Murray voló en un avión privado a Londres, donde descansará hasta el martes, para iniciar el operativo para el último torneo de la temporada e intentar retener el número uno.
El escocés afrontará el último torneo del año con una pequeña ventaja de 405 puntos, aunque deberá compensar las 275 unidades que perderá por la obtención de la Copa Davis del año pasado. Murray debutará ante el croata Marin Cilic y compartirá grupo también con el suizo Stanislas Wawrinka y el japonés Kei Nishikori.
"Me sentaré con mi equipo, tal vez antes de que comience Londres. Ivan (Lendl) llega el miércoles así que voy a mirar preparar mi agenda para la parte inicial del próximo año, con los objetivos hasta marzo", remarcó Murray. "Me he dado cuenta que he trabajado mejor cuando he tenido metas a corto plazo".
El británico llegó al número uno del mundo nueve años después de haber alcanzado el segundo puesto, por lo que no se quiere fijar objetivos de largo alcance.
"Nadie esperaba lo que sucedió en estos últimos meses después de Roland Garros (donde perdió la final ante Djokovic). Para mí también fue inesperado", reconoció Murray.
"No tengo idea de lo que puede pasar de acá a cinco o seis meses, pero, obviamente, me encantaría ganar el Abierto de Australia, porque es el próximo objetivo importante. He estado cerca varias veces y nunca lo he podido ganar" "No tengo idea de lo que puede pasar de acá a cinco o seis meses, pero, obviamente, me encantaría ganar el Abierto de Australia, porque es el próximo objetivo importante. He estado cerca varias veces y nunca lo he podido ganar", añadió.
Para Murray, de momento, no existe preocupación por el desgaste mental que viene sufriendo y por la presión a la que fue sometido en los últimos meses.
"Mentalmente he estado en un buen foco durante mucho tiempo este año y no me siento muy estresado lejos de la cancha. Los más agotadores son obviamente los partidos y siempre es más difícil cuando se pierde que cuando se gana", resaltó el nuevo número uno.
FUENTE: dpa