El costo para los contribuyentes estadounidenses del caos en la frontera se eleva de manera directa e indirecta en unos 200.000 millones de dólares cada año, desde que Joe Biden y la extrema izquierda ordenaron la política de "Puertas Abiertas".
El presidente del Comité de Seguridad Nacional, el representante Mark Green, inició el procedimiento de juicio político a Mayorkas en un momento político peculiar: en un lado del Capitolio, un grupo de senadores de ambos partidos ha estado involucrado en negociaciones casi diarias con Mayorkas sobre un paquete histórico de seguridad fronteriza. En el otro lado, el cuerpo legislativo quiere destituirlo de su cargo.
Al abrir la audiencia, Green, republicano por Tennessee, dijo que “no hay otra alternativa razonable que un juicio político”.
Más de 10.000 migrantes llegan a la frontera cada día
Los cruces fronterizos ase encuentran en niveles récord: han superado los 10.000 y 11.000 por día.
Un juicio político a un secretario del gabinete es poco común. Sólo ha ocurrido una vez en la historia de la nación: cuando la Cámara de Representantes llevó a juicio político al secretario de Defensa, William Belknap, en 1876, por sobornos en contratos gubernamentales.
“No se puede enjuiciar políticamente a un secretario del gabinete porque no te gustan las políticas de un presidente”, dijo Bennie Thompson, representante de Mississippi, el demócrata de más alto rango del comité.
Thompson debería decirle lo mismo a sus colegas que buscan condenar y poner en prisión a un expresidente por estar en contra de sus exitosas políticas, algo sin precedentes en la historia del país. Y lo intentan desde que Donald Trump asumió la Presidencia en enero de 2017. Durante todo su mandato lo persiguieron, lo acosaron y lo desprestigiaron hasta llevarlo a dos juicios políticos bajo la gran mentira orquestada con el FBI sobre la supuesta injerencia de Rusia en las elecciones de 2016, una falacia que destapó una investigación de casi cuatrto años del fiscal especial John Durhan.
Con la investigación del juicio político del Partido Republicano al presidente Joe Biden —por los negocios de su hijo Hunter Biden— moviéndose atropelladamente mientras los legisladores trabajan para desenterrar información, los republicanos agudizan su atención en los cruces fronterizos y la investigación sobre Mayorkas tras un caos de seguridad nacional que lejos de mermar, se agudiza.
El presidente de la Cámara Baja, Mike Johnson, aprobó el proceso y llamó a Mayorkas el “autor principal” de los problemas fronterizos. “El Congreso ahora tendrá que dar el siguiente paso y exigirle que rinda cuentas”, dijo en una conferencia de prensa.
Johnson habló el miércoles con Biden y lo instó que utilice su autoridad ejecutiva para asegurar la frontera sur, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Raj Shah.
"Crímenes y faltas graves"
El comité de Green llevó a cabo una investigación de varias partes sobre Mayorkas y sobre el Departamento de Seguridad Nacional, pero aceleró el proceso cuando la representante Marjorie Taylor Greene impulsó la resolución de juicio político, después de que Johnson ganara en marzo la presidencia de la Cámara Baja tras la destitución de Kevin McCarthy.
Queda por ver si la investigación de la Cámara de Representantes convence a todos los legisladores de que la conducta de Mayorkas alcanza el nivel de los “crímenes y faltas graves” que la Constitución especifica para un juicio político.
La gran mayoría de los republicanos prefiere regresar a las políticas de inmigración de la era de Donald Trump y culpan a Biden de detener la construcción del muro fronterizo y poner fin a las restricciones de la era de la pandemia de COVID-19 que impidieron que muchos inmigrantes ingresaran a Estados Unidos. Ambas políticas habían sido defendidas por el expresidente, quien marcha cómodamente a la cabeza para la nominación presidencial 2024 del Partido Republicano.
“La evidencia documentada a lo largo de este informe demostrará que Mayorkas ha incumplido, y continúa incumpliendo, el deber solemne de asegurar las fronteras de la nación”, dice el informe inicial del panel de la Cámara Baja.
Green, el presidente del comité, ha denunciado la conspiración conocida como la “teoría del gran reemplazo” cuando argumentó recientemente que la “intención” de Mayorkas de expulsar a menos inmigrantes que Trump y dejar entrar a millones era “cambiar fundamentalmente la población de Estados Unidos, y empoderar al Partido Demócrata a la perpetuidad”.
El lunes por la noche, Green dijo que lo que sucede en ambos lados del Capitolio son cosas “distintas”, y agregó que las negociaciones entre Mayorkas y los senadores “continuarán.
El Departamento de Seguridad Nacional publicó un memorando en el que señala que Mayorkas y los senadores de ambos partidos trabajan arduamente para encontrar “soluciones reales”.
Sin embargo, después de tres años en los que los republicanos se han cansado de pedir el control de la frontera y medidas verdaderamente efectivas, ni a los demócratas ni a Biden les ha interesado hacer absolutamente nada para arreglar las leyes de inmigración y retomar la seguridad en la frontera ante tanto caos.
Piden responsabilidad a Biden
El senador James Lankford, jefe negociador republicano del paquete fronterizo, quien ha estado en negociaciones casi diarias que involucran a Mayorkas, dijo que comprende las frustraciones de sus colegas. Pero los alentó a centrarse, como lo ha hecho él, en la legislación para obligar a Biden a actuar.
“Mayorkas acelera y cumple las políticas del presidente Biden; eso es lo que va a hacer un secretario”, dijo Lankford a los periodistas. “Así que aunque cambies al jefe de inmigración las políticas serán exactamente las mismas”.
El miércoles, en privado, Lankford informó a los legisladores republicanos de la Cámara de Representantes y el Senado sobre las conversaciones fronterizas, que sufrieron un revés esta semana.
Los congresistas tuvieron dificultades con ciertas diferencias, particularmente sobre los programas bajo palabra para permitir la entrada a Estados Unidos a inmigrantes que solicitan asilo mientras esperan procedimientos judiciales. Llegar a un acuerdo fronterizo es clave para un paquete de financiación más amplio para Ucrania por más de 60.000 millones de dólares, que se encuenta estancado en el Congreso.
Los conservadores preparan su esfuerzo para destituirlo de su cargo. La Comisión de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes planea celebrar audiencias a lo largo de enero con la finalidad de enjuiciar políticamente a Mayorkas.
Durante la sesión de casi cinco horas del miércoles, los republicanos denunciaron el desempeño de Mayorkas y dijeron que había incumplido con su trabajo de detener a inmigrantes que no tenían derecho a estar en el país y permitir que otros permanecieran mientras esperaban los procedimientos legales.
“Lo vamos a enjuiciar políticamente”, dijo el representante Clay Higgins, republicano por Louisiana.
El panel escuchó el testimonio de fiscales generales sobre el flujo de fentanilo a sus estados, a menudo proveniente de los cárteles de la droga, y de un profesor de derecho sobre los fundamentos del juicio político.
Si la Cámara de Representantes acepta enjuiciar políticamente a Mayorkas, el caso iría a juicio en el Senado, donde se necesita una supermayoría para condenarlo. En la era de Grant, el secretario de Defensa Belknap fue absuelto en el Senado.
“¿Su manejo de inmigración alcanza el umbral de ‘crímenes y faltas graves’? Esa es una pregunta a la que tendremos responder”, dijo el senador John Thune, el segundo líder republicano en el Senado.
[email protected]
FUENTE: Con información de AFP y AP