WASHINGTON — El presidente Donald Trump aseguró que el fallo del Tribunal Supremo contra la Ley de Enemigos Extranjeros, que permitía acelerar las deportaciones de migrantes, provocará que "más criminales ingresen" en el país y causará un "gran daño" al "querido pueblo estadounidense".
La Corte Suprema falló en contra de la Administración Trump al bloquear el uso de la Ley de Enemigos Extranjeros para acelerar la deportación de migrantes venezolanos vinculados presuntamente a redes criminales.
Los jueces del Supremo han determinado que los migrantes deben tener más tiempo para defender su caso ante los avisos de expulsión, que son emitidos 24 horas antes de que se lleve a cabo la deportación, según recoge la cadena NBC News.
"El aviso de aproximadamente 24 horas antes de la expulsión, sin información sobre cómo ejercer los derechos de debido proceso para apelar la remoción, no es suficiente", precisa el fallo.
El fallo fue emitido por 7 votos a favor, incluyendo a dos jueces conservadores nombrados por el presidente Trump durante su primer mandato, pero con disenso de los magistrados Samuel Alito y Clarence Thomas. Ambos jueces dijeron que todavía no le corresponde a la Corte Suprema pronunciarse sobre esta situación.
"Proceso legal largo"
"La Corte Suprema acaba de dictaminar que los peores asesinos, narcotraficantes, pandilleros e incluso aquellos con problemas mentales que ingresaron ilegalmente a nuestro país no pueden ser expulsados sin pasar por un proceso legal largo, prolongado y costoso", aseveró el mandatario en su cuenta de Truth Social.
Los jueces han determinado este viernes que los afectados por un proceso de deportación deben tener más tiempo para defenderse ante los avisos de expulsión que lo indicado en la legislación del siglo XVIII, una ley que la Administración Trump ha utilizado para deportar de forma 'express' a aquellos migrantes venezolanos a los que asocia a la organización criminal Tren de Aragua.
Trump manifestó que los jueces del Supremo no le están permitiendo "hacer lo que fue elegido para hacer" y se ha referido al "somnoliento" Joe Biden como el que "permitió que millones de extranjeros ingresaran" en el país "sin ningún proceso", ante lo que ahora, para su expulsión, debe haber un procedimiento "largo y prolongado".
Igualmente, agradeció a los magistrados Clarence Thomas y Samuel Alito, jueces conservadores que se han posicionado en contra del fallo del tribunal, por "intentar proteger a nuestro país".
"¡Este es un día malo y peligroso para Estados Unidos!", concluyó Trump en su mensaje.
La petición denegada
La Administración Trump pidió a la Corte Suprema reanudar las deportaciones de migrantes con base en la Ley de Enemigos Extranjeros, que se remonta al siglo XVIII y permite a la Casa Blanca expulsar a migrantes acusados de pertenecer a bandas criminales y que son luego enviados y encarcelados en El Salvador.
Asimismo, el Supremo envió el desafío legal de vuelta a la Quinta Corte de Apelaciones del Circuito de Estados Unidos, con sede en Nueva Orleans, para una revisión adicional. La máxima corte no ha determinado si esta legislación del siglo XVIII está siendo utilizada de forma correcta; el fallo se limita a apuntar que los migrantes deben contar con más recursos para afrontar sus casos.
La Administración Trump ha utilizado esta legislación para expulsar "en caliente" a los migrantes que identificaban como miembros de la organización criminal Tren de Aragua, independientemente de su estatus migratorio y, según denuncian las organizaciones pro inmigrantes, sin cumplir el protocolo necesario de deportación.
Un "peligro"
En este sentido, la administración Trump recordó que 23 de estos migrantes detenidos han protagonizado recientemente actos "peligrosos" como el de "atrincherarse en un centro de detención desde donde amenazaron con secuestrar rehenes y hacer daño a algunos agentes", según informaciones recogidas por la cadena de televisión CNN.
Dicho incidente se registró en el centro de detención de Bluebonnet, en Anson, y tuvo lugar después de que un vídeo grabado con drones mostrara a los migrantes realizando una señal de socorro en uno de los patios del inmueble. Los implicados en el incidente fueron trasladados a otra zona, donde existe una mayor vigilancia.
"Trasladar a estos presos a otras instalaciones crea nuevos riesgos ante la posibilidad de que el Tren de Aragua se expanda a centros penitenciarios y sus actividades se reproduzcan en Estados Unidos", alertaron las autoridades estadounidenses.
Desde que Trump regresó a la Casa Blanca, ha utilizado la citada ley para expulsar a los migrantes que las autoridades identifican como miembros de la organización criminal, independientemente de su estatus migratorio. Los abogados de los afectados rechazan en ocasiones vínculo alguno entre sus clientes y el Tren de Aragua u otras mafias declaradas como grupos terroristas, como el MS-13, la Mara Salvatrucha.
La ley solo se ha invocado en tres ocasiones anteriores en la historia de Estados Unidos, la más reciente durante la Segunda Guerra Mundial para recluir a civiles estadounidenses de origen japonés en campos de internamiento.
FUENTE: Con informaciòn de Europa Press