Un tiempo desacostumbradamente cálido antes de Navidad desató una ola de fuertes tormentas y tornados en áreas del centro-oeste y estados del centro-sur de Estados Unidos, dejando seis muertos y fuertes lluvias en la costa atlántica.
Los tornados se formaron durante la noche del miércoles y mataron a tres personas en Mississippi, dos en Tennessee y una en Arkansas, informaron medios locales.
El aire cálido y húmedo desde el golfo de México colisiona con el más frío y seco que llega de Canadá provocando estos fenómenos que en realidad son más típicos de primavera y verano (boreal) en Norteamérica. Los tornados son muy raros para el mes de diciembre.
Los tornados dañaron edificios, arrancaron árboles de raíz y dejaron 8.000 hogares sin electricidad en Mississippi. También en Illinois e Indiana se avistaron tornados pero no dejaron víctimas.
Hoy sigue siendo alto el riesgo de tormentas con truenos en la costa del golfo de México en Louisiana, Mississippi, Alabama y Florida, así como en la vecina Georgia.
También se esperan fuertes tormentas más al noreste, en Virginia, Maryland y Delaware, así como en la capital Washington.