MIAMI.- Construida en 1925 y señalada como el antiguo consulado de la República de Cuba en Miami, Villa Paula vuelve a la palestra con un precio de 4,5 millones de dólares que supera las expectativas.
MIAMI.- Construida en 1925 y señalada como el antiguo consulado de la República de Cuba en Miami, Villa Paula vuelve a la palestra con un precio de 4,5 millones de dólares que supera las expectativas.
La venta de la casona, que cuenta con 10 habitaciones que están distribuidas en 2.552 pies cuadrados de inmueble y está localizada en el número 5811 de North Miami Avenue, se adelanta al beneficio que el propietario espera tener del proyecto urbanístico Magic City Innovation District, que será construido en la zona y tendrá por inversión mil millones de dólares.
El agente de bienes raíces Jean-Louis Delbeke, que procura la venta bajo la firma Sotheby’s International Realty, anticipó a Miami New Times que el actual dueño del inmueble, 5811 Investment Group LLC, vende con los ojos puestos en Magic City “que va a traer un nuevo auge (económico y social) a la barriada”.
Hoy Villa Paula alberga una importante galería de arte, que es administrada por Martin Siskind y cuyo hermano Richard compró el inmueble por 275.000 dólares en 2003, asociado con Marc Swedroe.
De hecho, la casona que albergó la sede diplomática cubana en Miami recuperó su esplendor de los años veinte en 2015, luego de haber sido renovada como parte de un plan que parecía albergar la idea de crear un centro cultural comunitario.
No obstante, el precio de venta supera las expectativas, si tenemos en cuenta que la media de venta en La Pequeña Haití no supera los 312.000 dólares, apenas tres quintas partes del precio promedio en el resto de la ciudad de Miami, según reporta la base de datos de bienes raíces Zillow.
“Lo mismo sucedió en Wynwood y en el Design Distric, cuando los precios subieron”, replicó Delbeke. “Se trata de una zona en auge. Todo va a subir de precio”, subrayó.
Quien compre la edificación no podrá demolerla, ya que el ayuntamiento de Miami declaró al inmueble patrimonio histórico.
Además, la casona figura entre las pocas “casas embrujadas” que especialistas en asuntos paranormales adjudican a Miami, donde se cree “habita” el espíritu de la esposa del cónsul Domingo J. Milord, Paula, cuyo nombre fue adjudicado a la villa.
Según los datos históricos alojados en el archivo de preservación histórica de Miami, Villa Paula fue diseñada por el arquitecto cubano C. Freire, a similitud del estilo neoclásico que imperaba en La Habana en esos años, y construida con materiales importados de la isla caribeña, como ventanales, caoba y herrería.