MIAMI.- “Durante el trayecto fuimos perseguidos por varios carros, que se iban turnando a medida que íbamos atravesando las provincias”, declaró Carromero en Miami. (ÁLVARO MATA/ /DLA)
MIAMI.- Ángel Carromero, testigo de la muerte de Oswaldo Payá, en un oscuro accidente de tránsito, reiteró que lo ocurrido en Cuba fue un atentado.
MIAMI.- “Durante el trayecto fuimos perseguidos por varios carros, que se iban turnando a medida que íbamos atravesando las provincias”, declaró Carromero en Miami. (ÁLVARO MATA/ /DLA)
JOSÉ PERNALETE/ DLA
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El dirigente político juvenil español, Ángel Carromero llegó a Miami para reiterar su versión del accidente de tránsito en el que perdieron la vida los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero.
El joven dirigente español aseguró que la causa del lamentable incidente ocurrido el 22 de julio de 2012 “fue un atentado, no un accidente”.
Confirmó que un mensaje a través de Twitter reveló como la seguridad del estado cubano comenzó a seguirlos, después de que publicaran en la red social que el opositor cubano se dirigía a la ciudad de Varadero de vacaciones. A su juicio, esa información “delata” la persecución a la que fueron objeto.
De acuerdo el testimonio, “durante el trayecto fuimos perseguidos por varios carros, que se iban turnando a medida que íbamos atravesando las provincias”.
Al darse cuenta de que vehículos encubiertos de la seguridad los seguían, guardaron precaución para no exceder los límites de velocidad o cometer cualquier otra infracción que provocara una eventual detención.
El impacto que recibió el auto es lo último que recuerda Carromero que permanecía detrás del volante ese día. “Me montaron en una furgoneta y al llegar al hospital ya estaba todo militarizado […] pregunté por el resto de la gente y me dijeron que era el primero que había sido trasladado”, comentó.
Una vez en la camilla, este testigo advirtió que no sería tan fácil dar a conocer lo que en realidad pasó. “Al decirles que nos habían chocado, los militares me golpearon mientras estaba acostado y un perito me dijo que tendría que contar su versión si quería salir vivo de la isla”, denunció.
Carromero fue confinado seis meses en la cárcel de Bayamo, sin derecho a algún abogado o hacer llamadas telefónicas. “Me hicieron hacer un video que se grabó en varias partes, debí leer declaraciones escritas por ellos con modismos cubanos que no tenemos los españoles, eso es evidente” mencionó.
Considera que la investigación de la muerte de Payá cuenta con muchas irregularidades. Por ejemplo, a casi dos años y medio del suceso aún no se entrega un informe de autopsia del cadáver del opositor, no se tuvo acceso al cadáver o a los testigos “¿Qué se oculta?”, se preguntó.
La condena
En sus declaraciones, cuestionó que el señalamiento de estar presuntamente involucrado como causante del accidente se haya extendido hasta su tierra natal. “Yo sigo condenado por Cuba en mi país” sentenció.
No duda en asegurar que la evidencia filtrada en medios por parte del gobierno de la isla es prueba de la manipulación del vehículo para forjar un accidente que no ocurrió y reiteró que “mataron a dos principales disidentes de Cuba ese día”.
Enumeró algunas diferencias y alteraciones de piezas de la carrocería del carro al momento de tomar las fotografías que muestran incongruencias en la tesis emitida por la oficialidad.
“En Cuba cuando te señalan te condenan […] cualquier persona que piense diferente es perseguida y hostigada”, dijo.
Las declaraciones de Ángel Carromero fueron ofrecidas en el Salón Félix Varela del Santuario de la Ermita de la Caridad. En el encuentro de medios, además del padre Juan Rumín Domínguez, estaba presente el Arzobispo de Miami, Thomas Wenski, la viuda de Oswaldo Payá, Ofelia Acevedo y su hija, Rosa María Payá.