MIAMI.-JESÚS HERNÁNDEZ
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Tras el discurso del presidente Barack Obama en La Habana, en el que advirtió a los cubanos que si “el embargo se levanta hay muchas cosas que debe hacer el pueblo de Cuba para cambiar y mejorar su nación”, los cubanos en Miami reaccionaron con opiniones encontradas.
“Me parece muy bien que haya dicho eso allí, aunque de una manera diplomática, pero lo dijo: que el embargo comercial no es el culpable de la mala situación en la isla”, señaló a DIARIO LAS AMÉRICAS Frank Fernández, vecino de Coral Gables.
Luego aclaró: “Yo no estaba de acuerdo con el viaje de Obama a Cuba, para ser justo debo y admitir que su discurso fue magistral. Logró exponer la dictadura castrista, sobre todo cuando mencionó que la democracia es la forma de resolver los problemas”.
Mientras tanto, Gloria Benítez, residente de Hialeah, que acudía al Café Versailles en Miami, manifestó: “Yo prefiero no saber. Es mejor estar desinformada. No quiero ni ver las imágenes. Me atormenta la idea de ver al presidente estadounidense visitando Cuba, aún sin democracia”.
Sin embargo, Gustavo García, vecino de West Miami, comentó que “tras 57 años de dictadura, es el mejor discurso antiCastro que he escuchado. Nadie antes se atrevió a ir a La Habana y decir cuatro verdades, aunque fuera de una manera diplomática. No podemos esperar que un presidente, mucho menos el de Estados Unidos, pronuncie una arenga, aunque sean verdades, sin respeto al gobierno que lo acoge aunque sea una dictadura. Cuando visitamos una casa respetamos el anfitrión”.
Por otra parte, María Sánchez optó por la ironía para opinar: “Obama tendrá la mejor intención del mundo, pero no se da cuenta que ha sido un payaso más del gran circo de los Castro”.
Luego añadió: “Nunca imaginé que un presidente [estadounidense] visitara Cuba. Obama olvidó que la posición contra Cuba no es negociable. Allí no hay democracia y puso los intereses de Washington económicos primero, como antes hicieron con China”.
De hecho, Obama defendió los derechos humanos y la democracia, y dijo al gobernante Raúl Castro no debe temer a Estados Unidos ni a las "voces diferentes del pueblo cubano”.
Mario Gutiérrez, que llegó de Cuba hace un mes, cree que el viaje y el discurso de Obama ayudarán al cubano a pensar.
“Por más de 50 años el discurso ha sido el mismo, que si Cuba es un país libre, que los yanquis son malos y tienen la culpa de los males de la isla. Basta que alguien de la envergadura de Obama, el presidente del país más admirado por los cubanos, diga algo diferente para que los cubanos se den cuenta dónde está la verdad y exijan sus derechos”, resaltó.
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