Hasta este jueves 9 de mayo, en varios salones del Hotel Biltmore de Coral Gables, sesionará el 37 Congreso Hemisférico de la Cámara de Comercio Latina de los Estados Unidos (CAMACOL). Un evento que reúne a más de 100 empresas procedentes de casi 30 países. Según asegura su presidente, Nelson Tarke Jr., todos en busca de un objetivo común: poner en práctica los mejores caminos para el progreso.
"El progreso en todo sentido: empresarial, comunitario, nacional, global, y personal, que es muy importante, pues del impulso personal nace todo”, comentó a DIARIO LAS AMÉRICAS el presidente de la asociación comercial.
Hace sólo ocho meses que Tarke ejerce como presidente de CAMACOL. Pero sin lugar a dudas cuenta con una larga experiencia como miembro de la entidad, incluidos seis años como director, además de un fortísimo vínculo familiar.
“Me crie bajo la sombra del gran Luis Sabina, no por gusto mis colegas me suelen llamar “el Baby Sabina”. Ya llevamos varios congresos trabajando duro, y aunque éste efectivamente es el primero como presidente, la verdad en lo personal no siento grandes diferencias, a no ser que trabajo mucho más y que estoy pendiente aún más de cada detalle, creando siempre cosas nuevas que creo pueden ayudarnos. Amo esto. Es una pasión”, expresó.
Tarke confiesa que le enorgullece y emociona mucho su trabajo y su cargo: “Me tomó por sorpresa. Me hice presidente porque mis colegas me lo pidieron. No lo pretendí ni siquiera lo pensé. Seguir desarrollando el legado de mi padre y trabajar duro por CAMACOL, como él y tantos otros hicieron por décadas, es un deber que cumplo con mucho respeto y amor”.
Empresario proveniente del mundo tecnológico, Tarke ha sabido inyectarle a este congreso sus conocimientos en este terreno del comercio.
“Soy el primero de todos los presidentes de CAMACOL que no soy bodeguero. Los anteriores, al igual que mi padre, eran bodegueros. Conocer las tecnologías me ha hecho propiciarle al congreso una explosión tecnológica en todos los aspectos. De inicio, ya no te entregamos un panfleto cuando llegas al congreso, sino un App, a través de la cual, desde tu teléfono, puedes estar al tanto de todo. Gracias a esa Aplicación no se te pierde nada que no quieras. Por ello mis colegas dicen que este congreso es muy diferente a los anteriores”, señaló.
El espíritu y el derroche tecnológicos se pueden comprobar, a flor de piel, en diversas áreas del Biltmore. Casi 60 pantallas, varias de gran tamaño, están distribuidas con información y los diferentes logos de las empresas participantes en el evento. Un detalle que salta a la vista es la presencia de diferentes generaciones de empresarios.
“Todos están muy contentos y la alegría es súper importante para todo. Fíjate que por primera vez, en este congreso número 37, tuvimos 113 golfistas en el torneo de Golf de la Gala Inaugural, el primero de Camacol durante sus congresos hemisféricos. Una participación increíble. La gente dice “cómo me puedo apuntar, qué tengo que hacer, dónde me puedo inyectar de todo esto”. Es un crecimiento orgánico. Tenemos una pasión que es como el fuego. Se le ha echado la gasolina y ya no puede parar”, mencionó.
Para Tarke, en un futuro no muy lejano, el espíritu y la forma de este congreso serán vistos como el comienzo de una nueva etapa. “A veces toma tiempo que las personas en general se hagan parte de una visión, pero con la ayuda del congreso, y del equipo, que es espectacular, este espíritu de progreso, al compás de las tecnologías, va seguir desarrollándose muchísimo más y pronto contagiará a todos. Yo vengo al congreso todos los años. Pero creo con la ayuda de mis colegas, de mi familia, de mi equipo, éste va a ser un congreso para recordar”.
Además de la tecnología, el 37 congreso ha apuntado con fuerza al mercado internacional del cine, el turismo de negocios, las inversiones, la educación y los acuerdos comerciales.
"Es un gran logro contar en este congreso con la crema del cine inglés. Y eso no es porque quieren sabor latino. Eso es porque ven claramente el gran valor de la CAMACOL le trae. Y como han dicho, no sólo a ellos sino a la economía global".
Tarke está convencido de que el impulso de este congreso no mermará con su clausura. “Creo que al contrario, la gente se quedará tan entusiasmada que seguirá creciendo la llama. Y es lo más importante, que no lleguen a casa y piensen que fue otro congreso y ya, sino que sientan que esta pasión y esta visión hay que seguirlas trabajando, porque realmente hay ganancias, para todos, y que cada quien le vea una ganancia, eso es bueno para la gente, lo más importante son las personas, pues son las empresas privadas las que empujan y desarrollan la economía”.
Para Tarke es fundamental insistir en que los empresarios desarrollen una visión siempre más allá del presente.
“Hay ganancias que llegan muy rápido y otras que llegan más adelante, y un empresario debe saber que hay que trabajar no sólo para el ahora, pues lo inmediato puede ser fugaz. Hay que trabajar pensando en el futuro. Cuando se creó CAMACOL se hizo para ayudar a los empresarios del pueblo y ya somos un pueblo global y con una fuerte visión de futuro. Crear las bases para ayudar a las próximas generaciones, es algo fundamental y maravilloso. Una de las más importantes funciones de CAMACOL es la educación de la juventud y en estos congresos siempre lo tenemos en cuenta”.
Tarke agradeció a DIARIO LAS AMÉRICAS por ser un medio pionero de CAMACOL y de sus congresos hemisféricos. “Sin la ayuda de Diario Las Américas, que lleva más de 60 años informando a la comunidad, no hubiéramos tenido el mismo impacto. Cuenta mucho y se agradece su apoyo a CAMACOL y estos congresos”.
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