MIAMI.- JESÚS HERNÁNDEZ
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@hesushdez
El uso de esta planta con fines medicinales enfrentará en las urnas a quienes la aceptan y la rechazan
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La batalla por la legalización de la marihuana medicinal regresa a la palestra en la Florida, luego que la División de Elecciones certificó que los promotores de la legitimación lograron una cantidad de peticiones superior a las requeridas por la ley estatal, para realizar el referendo, por segunda vez, el 8 de noviembre.
No obstante, la gran cruzada por el sí o el no apenas comienza.
Están los que opinan a favor, como el presidente del grupo People United for Medical Marijuana (PUMM), el abogado John Morgan, que encabeza la campaña que apuesta por la aprobación del uso medicinal de la controvertida planta.
"Hemos validado 692. 000 firmas, 10.000 más que la cantidad mínima requerida por la ley, para dar a los votantes una segunda oportunidad y aliviar el sufrimiento a miles de pacientes que padecen diversas enfermedades", señaló Morgan.
La campaña anterior, que tuvo lugar en 2014, obtuvo el 58 por ciento de aprobación, dos puntos porcentuales menos del mínimo requerido por los estatutos del estado.
“Esta vez las condiciones son más propicias”, subrayó el presidente de PUMM. “No sólo las encuestas favorecen el sí con casi el 70% de los participantes, sino, además, el lenguaje de la propuesta es aún más preciso”.
De hecho, la proposición define las enfermedades que podrían ser atendidas con los derivados del cannabis, destacando cáncer, aids, epilepsia, glaucoma y párkinson, además de esclerosis múltiple, artritis y alzhéimer, entre otras.
Mientras tanto, la Legislatura en Tallahassee analiza la posibilidad de legalizar, en menor medida, la marihuana médica para pacientes terminales.
No obstante, Morgan tiene reservas sobre una solución favorable, similar a la que PUMM propone. “Hasta ahora, no han logrado un acuerdo. Esto nos obliga a convocar el referendo para enmendar la carta constitucional”, subrayó.
Acorde a una encuesta publicada por Quinnipiac Univeristy, el 87% de los floridanos aprueba el uso medicinal de la marihuana, pero el 51 por ciento desaprueba el uso recreacional.
“No se trata de autorizar, ni de estimular, el uso público de la hierba, sólo pedimos el derecho que tienen los enfermos a utilizar los valores medicinales que esta planta posee”, señaló el letrado.
Estudios
Ante todo, el uso medicinal de la marihuana padece una enfermedad difícil de curar: la mala imagen.
Muy a menudo escuchamos comentarios del tipo “sólo hay pruebas anecdóticas, donde un paciente dice haber notado mejoras al fumar o tomar un extracto de cannabis”.
Sin embargo, varios estudios científicos certifican, no sin antes estimular la polémica, que el uso terapéutico de la marihuana es una realidad.
Por ejemplo, un equipo de investigadores científicos de la Universidad de Washington publicó un estudio, en la revista Journal of Opioid Management, que devela el resultado positivo en la mayoría de 33 ensayos clínicos.
Entre los descubrimientos médicos destaca que “alivia las náuseas producidas por tratamientos de quimioterapia o de tratamiento contra el sida, además que ayuda a combatir la inapetencia y la anorexia. También ayuda a reducir la presión ocular que es asociada con el glaucoma”.
Seguidamente el informe científico subrayó: “El error más común es pensar que la eficacia terapéutica de la marihuana está fundamentada sólo por anécdotas contadas por pacientes”.
El informe, según las palabras del profesor Sunil Aggarwal, director del citado estudio, destaca la eficacia de la marihuana como analgésico y denota que los efectos adversos son relativamente raros o ausentes, en contraposición con los efectos secundarios que ocasionan los medicamentos convencionales.
“No se trata de placer ni capricho”, señaló Isabella Gutiérrez, una madre angustiada, vecina de Miami Springs, que implora el derecho a cuidar a su hijo de 12 años.
“Sufre epilepsia y es medicado con fármacos que lo alivian, pero al mismo tiempo afectan órganos vitales, como el hígado. Pregunto, por qué tengo que suministrarle el medicamento a escondidas. He notado cómo una dosis medicada de cannabis mejora paulatinamente el padecimiento físico, al mismo tiempo que evita los medicamentos que le hacen otros daños”, señaló.
Oposición
La organización Drug Free America Foundation, que logró recabar 2,5 millones de dólares para combatir la aprobación en 2014, adelantó que volverá a formar parte de la coalición contra la autorización del cannabis terapéutico en la Florida.
“Hemos seguido trabajando en contra de esta propuesta y continuaremos luchando contra ella en 2016”, aseguró la directora ejecutiva de la fundación, Calvina Fay.
Luego añadió: “Encontramos la sustancia medicinal cannabinoide en la marihuana, tal como encontramos el agente medicinal opioide en el opio. Sin embargo, los médicos no recomiendan consumir opio. ¿Por qué darle un trato preferencial a la marihuana cuando está comprobado que hace daño al cerebro?”
Por otra parte, hay políticos y agentes de los cuerpos policíacos en Miami-Dade y otras localidades del estado que se oponen a la legalización, aunque sólo opinan tras bambalinas porque prefieren mantenerse alejados de la controvertida propuesta. Creen que la aprobación de la marihuana terapéutica podría estimular el comercio ilegal y el uso recreacional de la droga.
“Simplemente temo que aumente el cultivo, la venta y el consumo entre los jóvenes”, comentó un teniente de la Policía de Miami que pidió mantener su nombre en el anonimato.
Según un informe del National Institute on Drug Abuse, el consumo de la marihuana afecta el sistema respiratorio y conlleva a problemas de respiraciones, tal como sucede con el uso del cigarrillo.
“Sin embargo, lo peor es el daño que ocasiona al cerebro. Hay estudios médicos que relacionan el uso de la marihuana con el incremento de riesgo que produce padecimientos mentales, como la depresión, la ansiedad y la sicosis”, amplió el informe.
Según la propuesta que será sometida al electorado en la Florida, sólo locales autorizados podrán comercializar la planta en cualquiera de sus variaciones y personal facultativo especializado recetar el consumo con fines médicos.
Mientras tanto, el uso de la planta para fines medicinales está permitido en 23 estados, aunque otros como Colorado, Washington, Oregón, Alaska y el Distrito de Columbia, donde se halla la capital federal, aprobaron el consumo de pequeñas cantidades con fines recreativos.
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