Cerca de dos millones de dólares en multas deben decenas de choferes que utilizan la plataforma tecnológica de Uber para movilizar a sus clientes en el Condado Miami Dade.
Dichas multas han sido aplicadas a estos conductores porque violan los códigos regulatorios del Condado. Pero lo paradójico de esta situación es que Uber funciona de manera ilegal pero, al mismo tiempo, alimenta una red estimada de cinco mil choferes que utilizan la aplicación de esta empresa que funciona en veinte estados de la Nación y está buscando entrar, en medio de gran debate, en los condados de Broward y Palm Beach.
De acuerdo con información suministrada a DIARIO LAS AMERICAS por el director de comunicaciones de Uber, Bill Gibbons, las miles de personas que trabajan con la plataforma tecnológica de esa empresa, “han devengado, de manera colectiva, más de 30 millones de dólares y han servido a más de tres millones de pasajeros, entre residentes de Miami-Dade y turistas”.
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Multas
¿Cómo puede recibir multas unas personas que trabajan en un servicio que no está legalizado, que opera en un limbo regulatorio? Mike Hernández, director de comunicaciones, del Condado Miami-Dade, respondió que “si fuera una cuestión criminal sería algo completamente diferente. Pero son infracciones del código regulatorio. Y al fin y al cabo recibir una multa de dos mil dólares y que te quiten el vehículo es algo muy doloroso para los choferes. Y vamos seguir aplicando la ley. Si pudiéramos acabar con el servicio, mientras no sea legal en el condado, lo habríamos hecho, pero no es posible. Tenemos sólo 25 inspectores y no todos trabajan al mismo tiempo”.
De acuerdo con las estadísticas del Condado, sólo en el Aeropuerto Internacional de Miami, hubo 1.154 multas para los conductores de Uber. Además, 1.167 multas alrededor del condado tanto para Uber como para Lyft. Hubo un total de 2.213 multas. Los afiliados a Uber han pagado 84 y los de Lyft, 11.
En este momento están apelando muchos de quienes han sido multados. De acuerdo con Hernández, tanto el escaso número de inspectores, como el hecho de que “la compañía Uber ha explicado y ofrecido sugerencias para que los conductores aprendan a cómo evitar a los inspectores”, hacen difícil que las autoridades puedan sacar del mercado un servicio que es criticado fuertemente por los sindicatos de taxistas.
Vacío
Desde el año pasado la Comisión del Condado Miami-Dade ha tratado de modernizar las normas para que tenga cabida este tipo de servicios, que utiliza una plataforma tecnológica en la que el pasajero pide el carro, no tiene que pagarle de manera directa al chofer, sabe quién lo recoge y la identificación del automóvil.
“Lo que ha dicho el alcalde Giménez es que debemos aceptar y darles la bienvenida a las compañías como Ubert y Lyft, manteniendo regulaciones para esas compañías y otras que serían las mismas que tienen los taxista y choferes,” puntualizó Hernández.
Los dueños de los llamados medallones (licencias para operar taxis) son 2.000 en el Condado. “Ellos deben mantener algún tipo de valor pero tampoco puede ser un sistema cerrado, debemos incluir a las compañías que utilizan esa tecnología”, añadió.
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Según lo advirtió Hernández, mientras la comisión del Condado no apruebe una propuesta del alcalde o de los comisionados (ya fue derrotada una que presentó el vicepresidente de la Comisión, Esteban Bovo), que modernicen las normas, “vamos a seguir multando a los conductores de Uber y Lyft”.
Uber reconoce ese vacío. En un comunicado enviado a DLA, firmado por Bill Gibbons, dijo que “no hay en la actualidad regulación alguna que de manera específica trate la tecnología que utiliza Uber. Sin embargo, hemos tenido una conversación constructiva con los comisionados para desarrollar un marco regulatorio moderno que abra un espacio permanente a Uber en Miami”.
Por ahora, Uber, después del 31 de julio, no operará en Broward y, en Palm Beach, tiene licencia para funcionar hasta el 30 de septiembre, a menos que la comisión decida, el próximo 18 de agosto, revocarle el permiso.
