MIAMI.- La ley española 12/2015, que concede la nacionalidad española a descendientes de sefarditas, en aparente franca ‘reparación’ a la expulsión a que fueron sometidos los judíos de España hace cinco siglos, continúa generando noticias por los estrictos criterios documentales, las demoras que suponen el proceso y las escasas aprobaciones de solicitudes.
“En la redacción del preámbulo de la ley se habla de punto de encuentro entre la España de hoy y los sefardíes que fueron injusta y cruelmente expulsados del país”, comentó a DIARIO LAS AMÉRICAS el abogado español Luis Portero, cuyo bufete en Málaga, España, procesa una extensa lista de solicitudes de nacionalidad.
“No se habla de reparación porque no se puede reparar lo que ya no tiene solución, pero sí mitigar el daño ocasionado y volver a reabrir las puertas de España a todos aquellos descendientes de judíos expulsados”, subrayó.
Portero trajo a la memoria que fue asesor especial de la Federación de Comunidades Judías de España en la Comisión Parlamentaria del Proyecto de Ley y que por ello conoce la ley muy bien y conoce el trámite de enmiendas que se propusieron en el Congreso de los Diputados y en el Senado español.
La presentación de solicitudes cerró en 2019, pero aún quedan miles de expedientes por procesar.
“Hay aproximadamente 9.300 expedientes por evaluar. Van con mucha lentitud porque ese número de 9.300 lleva así dos años. Es decir, no baja el número de expedientes pendientes de evaluar”, señaló.
Luego aclaró: “Es verdad que todos los meses se presentan unos más, expedientes que fueron abiertos dentro del plazo establecido, que quedaron pendientes de que se aportara documentación y se han ido enviando posteriormente. Pero eso no justifica la lentitud y la pasividad de la administración española con el tema”.
Demora
El retraso se ha intensificado en los últimos años. No son muchos los recursos que provee el Gobierno de España para agilizar el trámite.
“Más de unas administraciones que de otras”, esclareció.
“El gobierno socialista [de coalición] no tiene especial interés en tramitar expedientes de sefardíes originarios de España. Dicen que han concedido más de 71.000 nacionalidades españolas a los judíos sefardíes, pero no dicen que han denegado 7.254 solicitudes” y, sin embargo, por medio de la Ley de Memoria Democrática (conocida popularmente como ley de nietos), “ha concedido la nacionalidad española a 238.000 personas en un plazo de tres años por ser descendientes de españoles ‘que se vieron obligados a exiliarse’ durante la dictadura de Franco”, enfatizó.
A la pregunta ¿tiene algo que ver la posición de confrontación del gobierno de coalición del PSOE y Sumar con Israel? “Sin duda ninguna”, contestó rotundamente.
“Este gobierno es muy ideologizado por razones obvias. O sea, tiene a los comunistas en el gobierno, y los socialistas y los comunistas nunca han escondido sus posiciones de favorecimiento hacia la creación del Estado palestino. La vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, ha llegado a afirmar, haciéndose eco de un eslogan del grupo terrorista Hamás, de crear el Estado palestino desde el río [Jordán] hasta el mar [Mediterráneo]”, lo que significaría acabar con el Estado de Israel.
En otras palabras, “creo que hay un sesgo ideológico detrás de todas estas políticas, como en todas las administraciones”, puntualizó.
Y para ello, citó el ejemplo de Estados Unidos: “Pasa exactamente lo mismo. Las políticas de migración cambian según gobierne el Partido Demócrata o el Partido Republicano, y si no que se lo pregunten a los 650.000 venezolanos que van a tener que abandonar este país porque se acaba el programa del TPS”.
E insistió: “Las políticas cambian en función de quien gobierna”.
Proceso
Respecto a delegar en un notario la responsabilidad de reconocer si un solicitante tiene relación con una familia sefardí, el letrado explicó: “El proceso sefardí no es un tema de ingresión de nacimientos y legalización de documentos, como es el caso de la Ley de Memoria Democrática. El papel clave de todo el proceso de aprobación de los requisitos de origen sefardí y de especial vinculación con España, diga lo que diga el Gobierno actual, se delegó única y exclusivamente en el notario, al que se le dio la facultad de levantar un instrumento público que se llama Acta de Notoriedad, que en el reglamento notarial es el instrumento público más importante que existe”.
Y dijo más, que, durante los tres últimos años del Gobierno del Partido Popular, tras la aprobación de la ley en 2015, “se concedieron cerca de 25.000 nacionalidades españolas a descendientes de sefarditas y no se cuestionó nunca la opinión del notario. Es decir, si el notario consideraba que había origen sefardí y especial vinculación con España, se concedía la nacionalidad española”.
No obstante, el abogado Portero se queda “con el dato positivo de que hay 71.000 personas descendientes de sefardíes que han podido obtener la nacionalidad española”.
Y también se queda con el dato positivo de que “de las 7.254 denegaciones, se han logrado resolver 1.300 y tantas”.
Otro dato positivo es que, además de la ley de 2015, que concede la nacionalidad a descendientes de sefarditas, hay otra vía vigente: la Carta de Naturaleza del artículo 21 del Código Civil.
La Federación de Comunidades Judías de España ha reabierto su plataforma y cualquier persona descendiente que viva fuera de España, puede solicitar su certificado sefardí. Lo que significa que se ha reactivado el trámite de solicitud de la nacionalidad española por Carta de Naturaleza.
“Se han presentado cerca de 1.000 solicitudes de Carta de Naturaleza en 2025, que un mecanismo que otorga la nacionalidad española a personas que reúnen circunstancias excepcionales. Entre ellas los descendientes de judíos sefardíes, pero también hay actores, cineastas, escritores, poetas que han estado muy vinculados con la cultura española. Por ejemplo, el recientemente fallecido Mario Vargas Llosa era peruano, pero recibió su nacionalidad española por esta vía”, afirmó.
En efecto, “es un mecanismo mucho más simple que el de la ley del año 2015. Lo que pasa es que es un trámite que decide el Consejo de Ministros del Gobierno de España. Es decir, el presidente y sus ministros. Con lo cual, dependiendo del signo político que tenga el gobierno, esas cartas de naturaleza van a salir más rápida o más lentamente”, concluyó.
Inclusive quienes solicitaron la nacionalidad a través de la ley 2015 y fueron denegados, “pueden solicitar la nacionalidad por la Carta de Naturaleza siempre que obtengan el certificado sefardí de la Federación de Comunidades Judías de España, que es la clave de todo esto”, subrayó.
En otras palabras, no importa que haya sido denegado por la ley 2015.