sábado 30  de  noviembre 2024
ESPAÑA

Un Pedro Sánchez abucheado promete ayudar a víctimas de inundaciones

El presidente Pedro Sánchez se comprometió a ayudarlos "con todos los recursos del Estado" y de Europa, mientras rechaza ayuda de Francia, al estilo chavista

Por REDACCIÓN/Diario Las Américas

VALENCIA.- En medio de abucheos arribó este jueves, 31 de octubre, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a una Valencia devastada por el paso del DANA, que ha dejado decenas de muertos, desaparecidos e innumerables daños materiales, para hacer las mismas promesas, hoy incumplidas, que le hizo a las víctimas del volcán de La Palma en 2021.

"¡Fuera de Valencia!, ¡Sánchez dimisión!, ¡Que te vote Txapote!", fueron algunas de las consignas que recibieron al mandatario español a su llegada a la comunidad valenciana, donde esta semana se registró una de las tragedias más terribles de los últimos años en España, que ha dejado al menos 205 muertos, tres de ellos en Castillas-La Mancha y Andalucía, y mantiene, hasta el momento, más de 15.000 hogares sin electricidad.

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Sánchez llegó en avión desde India, para compartir su dolor y prometer ayudas a los afectados, al igual que hizo hace tres años a las víctimas del volcán de La Palma, cuya erupción se extendió por 85 días, dejando un muertos e innumerables daños de infraestructuras, edificaciones, vehículos y al sector agrícola, que ascendían a más de 842 millones de euros.

"Nuestra prioridad absoluta es ayudaros y vamos a poner todos los medios necesarios hoy y mañana, y el tiempo que haga falta. No os vamos a dejar solos (...) Nuestros pensamientos también están con quien ve su hogar anegado, sus propiedades destrozadas... Detrás de todos esos daños hay décadas de esfuerzo. Pero también os vamos a ayudar, con todos los recursos del Estado", prometió Sánchez.

Rechaza ayuda de Francia

El presidente español se comprometió a recibir recursos de Europa "si hace falta" para cumplir con la promesa de reconstruir plazas, puentes y edificaciones afectadas por las inundaciones.

Sin embargo, al mejor estilo de Hugo Chávez durante la tragedia de Vargas, Sánchez rechazó el ofrecimiento de ayuda de Francia, quien puso a disposición del Gobierno socialista hasta 250 bomberos, "con todo el material", para ayudar con las labores de rescate en las regiones afectadas.

Al igual que Chávez rechazó la ayuda de EEUU en diciembre de 1999, que incluía hospitales de campaña, 120 expertos en salvamentos y toneladas de alimentos, el mandatario español agradeció al Gobierno francés por la ayuda, pero alegó que "por ahora" no la necesitará.

"Tiene sus propios medios y se ha movilizado al Ejército", le habría dicho el ministro de Interior español, Fernando Grande-Marlaska, a su homólogo francés, Bruno Retailleau.

Promesas vacías

El ofrecimiento de reconstrucción de las comunidades de Valencia, Castillas-La Mancha y Andalucía, hacen eco en las promesas vacías que el Gobierno socialista le hizo a las víctimas del volcán de La Palma en diez ocasiones, quienes están "profundamente decepcionados" por el rechazo de Sánchez de reunirse con la Iniciativa Ciudadana de Apoyo a los Afectados del Volcán el pasado 26 de agosto.

"A pesar de las reiteradas solicitudes realizadas, el presidente estatal no accedió a atender a los portavoces de las miles de personas que aún sufren las consecuencias del devastador evento volcánico que arrasó sus hogares y afectó a sus vidas hace tres años", señaló la asociación.

Hasta la fecha, destacó, el Gobierno ha "promocionado con propaganda" de forma reiterada la idea de la reconstrucción y las ayudas "están resolviendo las necesidades" a las 1,600 familias afectadas por la lava que arrasó sus hogares.

"La realidad es otra bien distinta, al gastarse el grueso de la ayuda para reconstrucción en obras que nada tienen que ver con la catástrofe, inversiones que no resuelven en absoluto las necesidades vitales de los afectados, y que contemplamos con asombro", indicó la asociación, que subrayó que los afectados llevan "tres años de calvario", enfrentándose "a un sistema burocrático lento y complejo que agrava nuestra desesperación, pues hemos pasado de tener una vida resuelta, a la indigencia y la desesperanza más absoluta".

FUENTE: Con infromación de El Debate / El Periódico de Ibiza / El Mundo

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