Esta semana, la Cámara de Representantes en el Congreso aprobó mi resolución, H.R. 981, que condena la intimidación, la violencia, la persecución y los innumerables asesinatos cometidos por el régimen de Daniel Ortega contra civiles inocentes en Nicaragua. Los meses de violencia y descontento social que afectan al pueblo nicaragüense bajo sus opresores, no han pasado desapercibidos por el Congreso de los Estados Unidos.
Esta resolución obtuvo el apoyo bipartidista de mis colegas Mario Díaz-Balart, Carlos Curbelo, Eliot Engel, Paul Cook, Albio Sires, Ted Deutch, Norma Torres y Jenniffer González-Colón y fue aprobada por la Cámara para enviar un fuerte mensaje de solidaridad al pueblo de Nicaragua. Así esta resolución producirá la mayor condena a los asesinatos, arrestos, violencia y otras brutalidades que se han presentado en los últimos meses en Nicaragua.
También quiero informar que esta resolución viene después de mi ley Nicaraguan Investment Conditionality Act (NICA Act, por sus siglas en inglés) presentada en la Cámara de Representantes en 2017. Este proyecto de ley también cuenta con el apoyo bipartidista de mis colegas en el Congreso y condicionaría las ayudas económicas internacionales a Nicaragua. Este proyecto de ley, junto a la Resolución HR 981, subraya al régimen de Ortega como responsable de esta crisis mientras no combata la corrupción, restablezca la libertad de expresión y los derechos de los partidos políticos de oposición, periodistas, sindicalistas, defensores de los derechos humanos y otros activistas de la sociedad civil.
Un sistema judicial independiente y un consejo electoral también debería ser promovido y monitoreado por observadores electorales internacionales, para asegurar que se pueda lograr un cambio real. Mientras el estado de derecho se vea obstaculizado por el control tiránico de Ortega, el Gobierno de Nicaragua enfrentará una oposición continua del gobierno de los Estados Unidos a estos abusos, mientras ayuda a los ciudadanos de la afligida nación.
Ver a Ortega con la audacia de hablar en el canal de televisión Fox News y decir que todo está bajo control en el Gobierno nicaragüense es desgarrador para los millones de nicaragüenses que han presenciado la violencia de este régimen. Repudiamos las acciones de Ortega y sus secuaces y apoyamos incondicionalmente al pueblo nicaragüense y su libertad. Seguiré luchando en el Congreso por una Nicaragua libre; y no descansaremos hasta que se produzca un cambio democrático real en Nicaragua.