CARACAS.- El 27 de mayo de 2007, Hugo Chávez (1999-2013) concretó el primer gran golpe a la libertad de expresión en Venezuela. Bajo el argumento de la "no renovación de la concesión" por parte del Estado, el canal RCTV, pionero de la televisión venezolana, tuvo que apagar su señal y, desde ese momento, el régimen chavista demostró que no estaba dispuesto a permitir ninguna voz que le fuera incómoda a sus intereses.
RCTV fue cerrado por su línea editorial critica al chavismo. "Vayan buscando otra cosa que hacer, señores de RCTV", dijo Chávez durante un acto de saludo de fin de año a una representación de las fuerzas armadas en diciembre de 2006.
Y agragó: “pueden ir apagando los equipos, ya está redactada la medida, no se va a tolerar aquí ningún medio de comunicación que esté al servicio del golpismo y en contra del pueblo, de la nación".
Fue así como la noche del 27 de mayo de 2007 se apagó el canal, lo que marcó un hito en la construcción de la llamada "hegemonía comunicacional" del chavismo, cuyo objetivo es el de silenciar cualquier voz critica. Y no solo se apagó la señal de la televisora, el régimen también confiscó sus equipos transmisores y el dial en el espacio radioeléctrico fue ocupado por otro canal de corte oficialista.
"El cierre de RCTV se debió a motivos de índole política. RCTV dejó de transmitir por órdenes de una persona que no creía en la democracia, que participó en dos golpes de Estado, que mató y mandó matar gente en la calle el 4 de febrero de 1992 y el 11 de abril de 2002, y que nunca rindió cuentas por ello", declaró en 2015 el presidente de RCTV, Marcel Granier.
Desde ese momento, no han dejado de ocurrir en Venezuela continuados ataques a la libertad de expresión.
De acuerdo a un reporte de la ONG Espacio Público, encargada de monitorear y estudiar los medios de comunicación en Venezuela, durante las dos últimas décadas fueron cerradas al menos 285 emisoras de radio, siendo el 2022 el año con más cierres ejecutados (81) por funcionarios de la estatal Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) en todo el territorio nacional.
La Conatel alegó que las emisoras operaban de manera clandestina al no tener su estatus legal apegado a la ley; sin embargo, la Comisión no cumple debidamente su mandato principal de regulación al mantener en incertidumbre jurídica a la mayoría de las emisoras durante varios años, incluso ante la solicitud directa de actualización legal de los permisos para el uso del espacio radioeléctrico, denunció Espacio Público.
En 2023, la organización registró 55 casos que derivaron en 108 violaciones a la libertad de expresión en el país: 15 en enero, 16 en febrero, 16 en marzo y 8 en abril.
En los primeros cuatro meses de 2023 las denuncias por censura (26) ocuparon el primer lugar, seguida por los registros de intimidación (22), amenaza (16) y hostigamiento judicial (12); mientras que las violaciones con menor frecuencia fueron el hostigamiento verbal (11), las restricciones administrativas (10), la agresión (7) y el ataque (1).
FUENTE: REDACCIÓN / Con información de Espacio Público / El Nacional