El incendio pudo haber sido provocado por las propias internas para denunciar abusos sexuales y otros vejámenes, según una de las hipótesis que maneja la Procuraduría de los Derechos Humanos.
De las 29 fallecidas, 19 murieron calcinadas en el incendio, y el resto en centros asistenciales, según las autoridades.
Como muestra de repudio por el hecho y para denunciar una supuesta negligencia de las autoridades, este jueves un grupo de activistas de derechos humanos vertió carbón y colocó muñecas frente a la Casa Presidencial.
"Cómo no se pudieron dar cuenta para poder salvarlas a tiempo si el humo se ve al instante", dijo a la AFP, en la morgue de Ciudad de Guatemala, el tío de una menor de 15 años fallecida e identificada con pruebas de ADN y originaria del departamento oriental de Jutiapa, fronterizo con El Salvador.
El familiar de la menor, quien solo se identificó como Marvin, no salía del asombro por la magnitud de la tragedia.
Según versiones preliminares, la noche del martes, horas antes del incendio del miércoles, un grupo de jóvenes intentó fugarse tras denuncias de abusos y maltratos, y al menos 19 lograron escapar.
El hogar -a cargo de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia- es blanco desde hace tiempo de un escándalo por denuncias de abusos sexuales contra los internos.
Dos sectores del hogar de menores se vieron reducidos por el incendio.
El refugio alberga, por orden judicial, a menores de 18 años víctimas de violencia doméstica, de algún delito o que fueron rescatados de las calles, entre otros motivos. El centro cuenta con capacidad para 400 menores pero aloja a unos 800.
El presidente Jimmy Morales decretó tres días de duelo nacional por la tragedia, indicó su portavoz, Heinz Hiemann. En las afueras del centro, el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, ubicado en San José Pinula, a 10 km de la capital, entre el llanto y la desesperación, una multitud esperaba noticias sobre sus familiares. Muchos no podían hablar por el dolor. En los alrededores, se aglomeraron decenas de policías y vehículos de bomberos.
En la tarde del miércoles, una vendedora ambulante de 22 años aseguró que "no quieren dar información de nada". Ella buscaba saber qué pasó con sus tres hermanos, dos niñas de entre 13 y 15 años, y un hermano de 17.
"Nunca me imaginé que este lugar a donde lo vinieron a meter fuera tan peligroso", se lamenta con horror María Román, una ama de casa que intentaba conocer la suerte de su hijo de 16 años.
El ingreso al centro estaba prohibido por las autoridades y la pared principal de cemento, coronada con alambre de púas, no tenía daños que reflejaran la tragedia registrada en su interior.
Según cifras oficiales, el centro tiene capacidad para 400 menores pero actualmente alojaba a unos 800.
Bomba de tiempo
Según versiones preliminares, la noche del martes, horas antes del incendio de este miércoles, un grupo de jóvenes intentó fugarse tras denuncias de abusos y maltratos.
En el hogar están internados por orden judicial niños y adolescentes menores de 18 años, que sufren violencia doméstica o que fueron rescatados de las calles.
El centro -a cargo de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia- es blanco desde hace tiempo de un escándalo por denuncias de abusos sexuales contra los internos.
"Esto era una bomba de tiempo, esto era de esperarse", aseguró a la AFP un exempleado del área administrativa del centro, Ángel Cárdenas, quien aseguró haber interpuesto varias denuncias por abusos de las autoridades.
Rosa Aguirre aseguró que ya había denunciado abusos y maltratos ante la Fiscalía, pero que nunca le prestaron atención.
De acuerdo con la mujer, en el albergue ponían a pelear a sus hermanas entre ellas, mientras que al muchacho lo metían en un lugar llamado 'gallinero', un cuarto oscuro de castigo.
La casa del horror
Hilda Morales, procuradora de Derechos Humanos de la Niñez, advirtió que solicitará la clausura de ese albergue y responsabilidad penal contra las autoridades "porque han incumplido con su mandato".
Morales destacó que el año pasado solicitaron medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos luego de que varias adolescentes denunciaran vejámenes y abusos sexuales en el interior del refugio.
Por su parte, la oficina en Guatemala del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) condenó el incidente.
"Unicef repudia la tragedia en el Hogar Virgen de la Asunción. Estas niñas, niños y adolescentes deben ser protegidos", afirmó en un mensaje en Twitter.
El encargado de la Niñez de la Procuraduría General de la Nación, Harold Flores, recordó que desde el año pasado se han presentado denuncias contra ese hogar a raíz de reiteradas fugas de adolescentes que denunciaron violaciones.
El titular de la Secretaría de Bienestar Social de la Presencia, Carlos Rodas, aseguró que el 90% de los internos tienen familiares, pero son rechazados por los padres o sus familias para estar en el seno del hogar.
Asimismo, develó que en ese refugio también están internados adolescentes en conflicto con la ley, pero por falta de espacios en correccionales los jueces han ordenado su reclusión.
Según el funcionario, la noche del marte se fugaron 19 jóvenes por lo que se activó una alerta de búsqueda.
FUENTE: Henry Morales / AFP