El designado gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, aseguró en La Habana que "¡Hay que morirse por esta gente!", tras concluir una serie de recorridos por diferentes provincias, los primeros que realiza desde su nueva posición política.
El designado gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, aseguró en La Habana que "¡Hay que morirse por esta gente!", tras concluir una serie de recorridos por diferentes provincias, los primeros que realiza desde su nueva posición política.
Según relata el portal web CiberCuba, el mandatario designado en mayo último por la unicameral Asamblea Nacional, se refería con esa frase a lo que le correspondería hacer a un político luego de descubrir, en su intercambio con la población, que aún quedan muchos cubanos que tienen esperanzas en el gobierno.
Intercambiar con gente que vive en condiciones que Díaz-Canel califica de "determinada complejidad" le permitió ver "lo que esperan" y "el compromiso que tienen con la Revolución, el compromiso que tienen con los fundadores de la Revolución", reveló el político, que aseguró luego: "¡Hay que morirse por esta gente!, y la interpretación de ese 'morirse' es que hay que vivir, y hay que hacer bien las cosas para que la gente pueda seguir creyendo".
Su postura ha sido interpretada por muchos como un intento de acercamiento para que la población lo conozca y lo acepte, y en ese afán "ha compartido en la calle con jóvenes y ancianos. Jugó baloncesto en una escuela, se preocupó por la limpieza de los baños" y le preguntó a unos estudiantes en la oriental provincia de Granma "qué hacían cuando se conectaban a internet".
Al parecer, en un país con uno de los niveles de acceso a internet más bajos del mundo, el recién estrenado mandatario intenta que los jóvenes de la isla, cuando accedan a la red, lo hagan para conectarse "por la Revolución".
En su recorrido por varias provincias, el hombre que no toma decisiones importantes en el país (esas todavía quedan en manos de Raúl Castro) no se escandalizó en lo más mínimo cuando le gritaron "comandante" en las calles de Cienfuegos, un grado militar que no ostenta pero que lo liga a la cúpula del régimen, concluye CiberCuba.
FUENTE: EFE