AGENCIAS.- Tras casi dos años de espera, el expediente presentado por el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner podría conllevar a la "verdad", según declaró el presidente argentino, Mauricio Macri.
"Todo lo que contribuya a que lleguemos a la verdad en todos los aspectos de lo que nos ha pasado, de los que nos pasa y nos pasará, es fundamental. Creo que se ha dado un gran paso", dijo el presidente argentino a una emisora de radio en el país sudamericano, según reportó la agencia dpa.
La Cámara Federal de Casación Penal decidió reimpulsar la acusación que Nisman, el fiscal que murió en condiciones muy cuestionadas, había realizado contra la exjefa de Estado argentina (2007-2015), su canciller Héctor Timerman y dirigentes kirchneristas por supuesto encubrimiento de ciudadanos iraníes acusados de cometer el atentado al centro comunitario judío Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en Buenos Aires, en 1994, que ocasionó 85 muertes y 300 heridos.
Los jueces Ana María Figueroa, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky creen que existen motivos suficientes para proseguir con la denuncia, pese a que en dos ocasiones otras instancias de la Justicia argentina desestimaron las acusaciones por falta de pruebas.
Al respecto, Macri destacó el "coraje" que a su criterio demostraron los jueces del caso, quienes "han tenido muchísima presión" para que no se investigara la denuncia de Nisman.
Antecedentes
En enero de 2015 Nisman denunció "la existencia de un plan delictivo, destinado a dotar de impunidad a los imputados de nacionalidad iraní que fueron acusados del atentado a AMIA, para que eludan la investigación y se sustraigan de la acción de la justicia argentina".
Nisman era el fiscal especial de la causa que investiga el ataque a la AMIA, el segundo atentado terrorista contra un objetivo judío en Buenos Aires, luego de la embajada de Israel en 1992.
El fiscal denunció que el memorando de entendimiento firmado por Argentina e Irán en 2013 con el alegado propósito de esclarecer el atentado era una pantalla y fue la presunta herramienta empleada por el gobierno de Fernández para proteger a los iraníes.
Cuatro días después de presentar su denuncia y un día antes de declarar ante el Congreso sobre la investigación, Nisman fue hallado muerto en su apartamento de Buenos Aires de un disparo en la cabeza.
Según las autoridades investigativas, aún no se sabe si fue un suicidio o un homicidio.
La Justicia argentina declaró entonces inconstitucional dicho acuerdo, cuestionado por resignar la jurisdicción de la justicia argentina para juzgar a los acusados del ataque contra AMIA en una comisión internacional extrajudicial.
La Cámara no se pronunció sobre la supuesta responsabilidad de la expresidenta y los otros acusados pero consideró que la denuncia de Nisman reviste suficiente gravedad para que sea investigada.
"Lo que hay que hacer es investigar porque es muy grave", indicó Macri.
En tanto, el Centro de Información judicial informó que el juez federal Ariel Lijo investigará la denuncia de Nisman.
Mientras tanto, la expresidenta argentina recurrió a las redes sociales para rechazar las imputaciones.
"El problema no es si abren o no abren la desprolija y apurada denuncia de Alberto Nisman. No es eso lo que le interesa a la coalición judicial-política-mediática que vive alineada con la derecha norteamericana e israelí. Lo que les interesa es asegurarse que no vuelvan gobiernos que tengan la idea de la redistribución de la riqueza", publicó Fernández en Facebook.
La investigación iniciada por Nisman está ahora en manos del juez federal Ariel Lijo, que a principios de 2015 había decidido no tomar el caso.
El nombre del juez Lijo se conoció luego de un "sorteo informático" realizado por la Cámara Nacional en lo Criminal y Correccional Federal de la Argentina, informó el Centro de Información Judicial (CIJ).
FUENTE: REDACCIÓN
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