LA HABANA — Las familias cubanas se enfrentan a la falta de dos productos fundamentales en su dieta, el azúcar y arroz. Estos alimentos escasean desde hace meses en el sistema de racionamiento de la Isla.
La producción azucarera en la isla viene en declive desde hace un par de años, y lo que se produce no alcanza ni para el abastecimiento nacional
LA HABANA — Las familias cubanas se enfrentan a la falta de dos productos fundamentales en su dieta, el azúcar y arroz. Estos alimentos escasean desde hace meses en el sistema de racionamiento de la Isla.
La situación con la venta del azúcar y el arroz racionados en las bodegas del país ha empeorado durante este último año. Según declaraciones de Homero Acosta Álvarez, secretario de la Asamblea Nacional y del Consejo de Estado, en la zafra 2022-2023 se producirán apenas las 350.000 toneladas de azúcar, con lo cual es poco probable que la escasez de ese producto mejore, detalla Diario Cuba.
La producción azucarera en la isla viene en declive desde hace un par de años, y lo que se produce no alcanza ni para el abastecimiento nacional.
Las cifras se suman a la de la producción agropecuaria, ha disminuido un 35% entre 2019 y 2023, según datos oficiales publicadas por el diario estatal Granma, la cifra podría ser mayor.
La producción de azúcar, otrora industria principal de Cuba, se desplomó de 816.000 toneladas en la temporada 2020-2021 a 470.000 en 2021-2022.
y la mayor parte del arroz que se consume en Cuba es importado o procede de donaciones.
"En la década en curso la producción arrocera se ha visto muy limitada debido, en lo fundamental, a la carencia general de insumos, así como de las piezas de repuesto para las combinadas arroceras", según dijo al diario oficial Granma hace un año Linares Morell, director de la División Tecnológica del Arroz del Grupo Empresarial Agrícola, adscrito al Ministerio de la Agricultura.
El funcionario aseguró que el Programa Integral del Arroz, un plan de ese Ministerio para alcanzar el autoabastecimiento del grano en el año 2030, difícilmente llegaría a cumplirse, pues de las 200.000 hectáreas necesarias para producir las 600.000 toneladas de arroz que constituyen la demanda nacional, en este 2023 solo se podrían sembrar 68.000.
El resultado es el desabastecimiento que encuentran los cubanos actualmente en las bodegas estatales y los precios en los agromercados privados, donde la libra de arroz se vende a casi 200 pesos este fin de año.
La prensa oficial, como es habitual, culpa al embargo estadounidense, a los efectos de la pandemia y la guerra en Ucrania, de la baja producción de arroz. Pero en otros reportes admite que los problemas para aumentar la producción de arroz en Cuba provienen de la Tarea Ordenamiento, por el impacto que ha tenido en los costos de producción.
En medio de la peor crisis económica en tres décadas, el régimen cubano aprobó en 2021 las pequeñas y medianas empresas (MIPYMES), que ganan presencia en la venta de comida y productos básicos importados. Sin embargo, para el cubano de a pie resultan caras por la devaluación que ha registrado el peso en los últimos dos años.
Hay arroz y azúcar en las tiendas privadas, pero están fuera del poder adquisitivo de la mayoría del pueblo. Por ejemplo, Silvia, de 73 años, tiene una pensión de 1.800 pesos al mes con la que le es prácticamente imposible comprar en las MIPYMES, donde la libra de arroz cuesta 250 pesos y el azúcar 400 pesos. Con su jubilación no tiene más remedio que depender de la cada vez más menguada canasta básica que vende el Estado.
Un caso similar es el de Daimara, residente del municipio Centro Habana. En su familia han decidido priorizar a los niños, asegurándose de que tengan al menos dos comidas al día. Hace varios meses que los adultos disminuyeron sus raciones diarias.
Yosvany Pupo Otero, viceministro primero del Comercio Interior, dijo en el programa de la televisión estatal Mesa Redonda, el pasado 18 de noviembre, que se expenderían las siete libras de arroz normadas por persona, aunque la venta sería dividida en dos momentos. Pupo aseguró que la misma cantidad estaba asegurada para diciembre y se entregaría sin retrasos.
Sin embargo, el anuncio de Pupo no se cumplió y la escasez se ha agudizado en las últimas semanas.
La descarga de un barco de arroz en Cienfuegos, anunciada este 24 de diciembre, podría mejorar el suministro estatal de cara a fin de año, una buena noticia para los cubanos de más bajos recursos.
FUENTE: Diario de Cuba y Redacción DLA