CARACAS.- Un niño con el corazón roto, tras el trágico asesinato de su padre, crece y se alimenta soñando con vengar su muerte y salvar a su madre. Nada ni nadie se interpondrá en el camino de Amleth (Alexander Skarsgård). Ni pueblos inocentes y mucho menos, su propia sangre.
Robert Eggers( La bruja, El faro), mete al espectador en la pantalla y hace que viva el infierno de su protagonista en El hombre del norte, cuyo drama se desarrolla en la Islandia del siglo X.
Alexander Skarsgård (Big Little Lies, True Blood) ha labrado palmo a palmo su carrera encarnando roles tan poderosos como disimiles, pero que tienen como mínimo común denominador la fuerza de su carácter; y su interpretación en este largometraje no es la excepción.
En medio de la satisfacción que puede significar para el histrión estar a la cabeza del elenco, también integrado por Nicole Kidman, Claes Bang, Anya Taylor-Joy, Ethan Hawke, Willem Dafoe y Björk, advierte sobre la naturaleza violenta de la cultura vikinga y defiende la representación hecha por el realizador, quien coescribió el guion con Sjón.
“Queríamos ser brutales y viscerales, y mostrar una representación más realista de estas batallas de lo que la mayoría de la gente está acostumbrada”, comentó.
Alexander Skarsgård sabe que rehuir la brutalidad de sus ataques no es sólo incorrecto sino peligroso.
“Era importante hacer una gran cantidad de investigación sobre cómo luchaban, la estrategia detrás de esto, el propósito detrás de esto, y una gran mercancía era la esclavitud, así como era importante no retratar a estos luchadores como dioses heroicos del norte”, agregó.
El hombre del norte ha sido bien recibida por la crítica, ya que a su juicio, ha contribuido a recuperar lo épico y grandioso de las películas clásicas de Hollywood. El portal especializado Rotten Tomatoes le da 89% de tomates frescos.