PARÍS.- Las siluetas son ultrafemeninas y los desfiles son convencionales, lejos de algunos escándalos recientes, en la Semana de la Moda femenina que se termina este martes en París.
PARÍS.- Las siluetas son ultrafemeninas y los desfiles son convencionales, lejos de algunos escándalos recientes, en la Semana de la Moda femenina que se termina este martes en París.
Se destacaron los emocionantes homenajes a dos figuras desaparecidas, Vivienne Westwood y Paco Rabanne, y la discreción de Balenciaga, tras una controvertida campaña publicitaria con niños y guiños al sadomasoquismo que motivó una disculpa pública de su creador, Demna.
Saint Laurent hizo del traje chaqueta con falda su propuesta principal para el otoño invierno de 2023/2024.
Falda lápiz con abertura, chaqueta con hombreras, escote pronunciado y tacones de aguja: todo se nutría de los archivos de la casa de los años 80.
Dior remontó más lejos en el tiempo, hasta la estética de los años 50. El legendario fundador de la firma inventó en esa década el New Look para la mujer, para ahuyentar los recuerdos de estrecheces de la guerra.
Las faldas vuelven a ser amplias, por debajo de la rodilla, las cinturas marcadas, los estampados florales. La mujer lleva guantes y tacones, aunque con toques de rebeldía punk, por ejemplo con tejidos arrugados.
El joven estilista Charles de Vilmorin también revisitó los años 50 para Rochas, con faldas tubo y cinturas de avispa.
Givenchy redefine la elegancia mediante una chaqueta de grandes hombreras, con falda o una minifaldilla transparente.
Para la casa Vivienne Westwood, el traje femenino es de malla, con sombrero y botas doradas.
Rojo
El rojo dominó la colección depurada de la mujer Hermès, "poderosa y sensual".
Lanvin le puso una capucha también roja a un vestido de lentejuelas. Issey Miyake lo utilizó para sus abrigos.
Para su primera colección en la casa Ann Demeulemeester, Ludovic de Saint Sernin utilizó el rojos burdeos, muy oscuro, casi como un "falso negro", minimalista.
El rojo no supone ninguna connotación negativa en ninguna cultura e incluso es aceptada por los que no aman los colores, explica a la AFP Christian Louboutin, que festeja sus 30 años de suela roja para sus zapatos y escarpines.
Tacones
Los tacones triunfan en todas las pasarelas, ya sea como estiletos para Balenciaga, Ann Demeulemeester o Saint Laurent, combinados con las habituales botas hípicas de Hermès, e incluso para la diseñadora Maria Grazia Chiuri, que antes no las utilizaba en sus colecciones para Dior.
"Feminista, antifeminista... espero que ya hayamos superado todo eso. Las mujeres han ganado, son dueñas de su cuerpo", razona Pierre Hardy, responsable de las colecciones de calzado de Hermès, para la AFP. "Es una elección íntima y personal", explica.
Vivienne y Paco
El ruido de vestidos creados con materiales "improbables" y la voz de Paco Rabanne resonaron en el Museo de Arte Moderno de París, lugar idóneo para el creador vasco que inventó la moda "metálica".
Rabanne falleció el pasado 3 de febrero tras toda una vida dedicada a la moda en Francia. Varios vestidos dorados y plateados cerraron el desfile, con la intención de evocar sus creaciones vanguardistas.
Andreas Kronthaler, marido de Vivienne Westwood, que murió en diciembre, presentó un desfile en homenaje a la reina del punk.
Cora Corré, nieta de Vivienne Westwood, desfiló con un body blanco de encaje, como un vestido de novia, para cerrar el emocionante desfile.
Ruptura en Balenciaga
Balenciaga presentó un desfile muy depurado, diferente de sus shows precedentes. Fragilizado por la campaña que mezclaba niños y accesorios de inspiración sadomasoquista, Demna presentó una colección algo severa.
"La casa no necesita" shows, cuando además "pueden ser mal interpretados", explicó François-Henri Pinault, presidente del grupo Kering, la casa matriz de Balenciaga.