MIAMI.- En el legendario campo de juego del Comerica Park, donde el eco del béisbol retumba en cada rincón, el eximio músico venezolano Jorge Glem tomó su lugar en el centro del campo. Y con un cuatro venezolano entre sus manos, un instrumento pequeño pero cargado de historia, sorprendió a todos al transformar las notas del himno de los Estados Unidos en un puente musical entre dos culturas.
Fue un momento cargado de solemnidad y emoción, ya que su interpretación resonó como un susurro profundo, como si cada cuerda vibrara con la esperanza de dos naciones, tejiendo una narrativa común de libertad y unión.
Para muchos, este nuevo hito en su carrera consolida el éxito profesional de Jorge Glem a nivel mundial, y cómo no, si por primera vez en Comerica Park el béisbol quedó en segundo plano, y el alma de un país se entrelazó con la esencia de un músico que, con su cuatro entre los brazos, hizo que dos mundos se encontraran en el corazón de Detroit, durante el juego entre los Tigers y los Orioles.
“El cuatro es el instrumento que todos los venezolanos hemos visto desde que somos niños. En todas las casas hay un cuatro […] La experiencia en Detroit fue maravillosa, y me siento muy honrado de ser parte de esta camada de músicos venezolanos que están internacionalizando nuestro instrumento nacional”, dijo Jorge Glem a DIARIO LAS AMÉRICAS.
“Pararme en el icónico Comerica Park fue una responsabilidad y un reto enorme. Primero, por el hecho de interpretar el himno nacional de un país que no es mío; y segundo, porque Estados Unidos es el país que nos ha abierto las puertas y yo quería reflejar esa gratitud en nombre de todos. Fue una experiencia enorme que disfruté muchísimo. Es un honor que me hayan invitado”, añadió.
Un punto de encuentro
Miami se ha consolidado como la capital indiscutible de la música latina. Un santuario donde ritmos tropicales y voces de todo el mundo convergen bajo el mismo cielo. En cada esquina, se respira el eco de una melodía que traspasa fronteras, y sus estudios de grabación, bañados por el calor caribeño, se han convertido en el hogar de los más grandes exponentes de la música global. Desde el reguetón que sacude las playas, hasta las baladas que embelesan al mundo, Miami no solo marca el compás de la industria, también acoge a músicos de todos los rincones del planeta, como Jorge Glem.
Actualmente, el músico confiesa que en medio de sus giras globales y viajes, disfruta como nunca de la ciudad y en particular de un espacio que se ha posicionado como El templo de la salsa en Miami. Se trata de El Maní, restaurante y salsa bar ubicado en Doral, donde cada lunes el músico y productor venezolano presenta una experiencia conocida como jam global session [sesión improvisada global].
“Es un sitio principalmente de salsa que ofrece música en vivo, y yo disfruto muchísimo estar ahí. Es por eso que los lunes presentamos una experiencia global en la que cada semana una agrupación, que representa un género musical distinto, se sube al escenario con nosotros. Hemos interpretado brazilian jazz, fusion spanish jazz, latin soul, música tradicional cubana, música venezolana de ensamble. Allí la idea es que se acerquen todos los músicos para tocar y descargar con nosotros”, dijo Glem.
poster gira jorge glem
Póster promocional de la gira por Europa de Jorge Glem, que arranca el 13 de octubre en Barcelona.
Cortesía/ Jorge Glem
Próximas presentaciones
Glem celebra por partida doble el éxito de un año cargado de desafíos y grande oportunidades. Por primera vez logró dos nominaciones al Latin Grammy, en la categoría mejor álbum folclórico, por el disco C4 suena a Navidad; y mejor álbum instrumental, por el disco Tembla, junto a Hamilton de Holanda, multipremiado compositor reconocido en el mundo por reinventar el tradicional bandolín brasileño.
“La noticia de las nominaciones nos hizo inmensamente felices ya que ambos discos son muy especiales. Tembla, por ejemplo, es un álbum del que nos sentimos muy orgullosos porque presenta covers de canciones legendarias sin pasar por alto los clásicos modernos de Alejandro Sanz, Carlos Vives, Juan Luis Guerra, Chico Buarque. Y C4 suena a Navidad cuenta con colabores de lujo con Oscar D'León, Andrés Cepeda, Jorge Luis Chacín, y muchos más”, detalló.
Cabe destacar que C4 Trío, fundado en 2005 por los cuatristas Jorge Glem, Edward Ramírez y Héctor Molina, a quienes posteriormente se unió el bajista Rodner Padilla y más tarde Gustavo Márquez, ha girado alrededor del mundo con un éxito sin precedentes, por lo que la agrupación es considerada una de las propuestas musicales más innovadoras de la cultura venezolana.
“Los venezolanos estamos atravesando horas oscuras, pero creo que también estamos más cerca que nunca de ese amanecer que estamos esperando todos. Todo lo que ha sucedido estos últimos meses representa el grito de libertad que todos estábamos ansiosos de oír. Viene algo maravilloso para nuestro país, y yo estoy más orgulloso que nunca de ser venezolano”, finalizó.
Este 5 de octubre Jorge Glem se presenta en el Adriana Barraza Acting Studio, en un concierto íntimo a beneficio del Festival Entrelibros, celebrando durante el Mes de la Herencia Hispana y que constituye el primer festival de literatura infantil y juvenil en español en Miami.
“El concierto será un vacilón, porque estaré contando la historia de cómo salí de mi ciudad, además de anécdotas de mi familia y de mi país. Es un viaje entre la música tradicional venezolana, el jazz, el bolero, la salsa, de todo un poso. Una travesía en la que narro mi historia de forma musical”, adelantó.
Para más información, visite www.entrelibrosfest.org