Durante 9 años la cantante Katy Perry estuvo peleando un juicio en el que se le señalaba de un supuesto plagio por su popular tema Dark Horse.
Durante 9 años la cantante Katy Perry estuvo peleando un juicio en el que se le señalaba de un supuesto plagio por su popular tema Dark Horse.
A la cantante se le acusó de plagio por su canción ya mencionada, pues un artista llamado Flame afirmó que parte de su sencillo fue tomado de su rap llamado Joyful Noise.
La corte en aquel momento señaló que la canción de Perry había copiado varios elementos de la otra, por lo que tenía que abonar 550 mil dólares mensuales al otro cantante, el resto del equipo de la artista, el productor Max Martin tuvo que pagar 253 mil dólares y Dr. Luke un poco más de 200 mil dólares.
Afortunadamente, otro magistrado decidió seguir con el caso y admitió la apelación y después falló a favor de Katy Perry y Dark Horse.
Según la revista Billboard, el tribunal compuesto por tres jueces determinó de forma unánime que el parecido entre ambas canciones es pura coincidencia, por lo que liberó a los demandados de cualquier responsabilidad. Además, el patrón de ocho notas, conocido como ostinato, consistía “totalmente en elementos musicales comunes” que carecían de la “cantidad de originalidad” necesaria para la protección de los derechos de autor.
"El fragmento de Joyful Noise que se solapa con Dark Horse no es más que un arreglo manifiestamente convencional de bloques de música. Permitir que se apliquen los derechos del copyright en un material de esta naturaleza implicaría esencialmente imponer un monopolio de uso para una secuencia de dos notas, o para toda una clave", señaló un extracto de la sentencia que se llevó a cabo este jueves 10 de marzo.
FUENTE: REDACCIÓN