MIAMI.- En su más reciente trabajo ante las cámaras, Majida Issa se enfrentó al personaje más desafiante que haya encarnado. La actriz colombiana interpreta a Eva Cortés, el rol protagónico en La sustituta, que se puede ver en la plataforma de ViX.
La actriz revela cómo construyó su personaje protagónico en La sustituta, una serie de suspenso en la que encarna a una mujer con múltiples trastornos de personalidad
MIAMI.- En su más reciente trabajo ante las cámaras, Majida Issa se enfrentó al personaje más desafiante que haya encarnado. La actriz colombiana interpreta a Eva Cortés, el rol protagónico en La sustituta, que se puede ver en la plataforma de ViX.
Concebida por Julio Jiménez e Iván Martínez, la serie es un thriller psicológico que narra en 50 capítulos las vidas entrelazadas de tres mujeres, interpretadas por Majida Issa, Geraldine Zivic y Rami Herrera, tras un caso sin resolver que revelará mentiras y el oscuro pasado que ocultan.
“Es una historia muy interesante con personajes misteriosos y giros inesperados. La cabeza de todo esto es Julio Jiménez, que es una leyenda en Colombia; le llaman el maestro del suspenso porque ha revolucionado la televisión en este país. Es una trama que mantiene al espectador en suspenso, todo el tiempo tratando de atar cabos. Es muy divertido porque realmente el misterio lo resuelve el televidente. En esta historia nada es lo que parece, y eso es bastante interesante y, a la vez, muy complejo”, expuso Majida Issa en entrevista vía telefónica con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Eva Cortés, el personaje de Issa, llega a trabajar a la casa de Victoria de Urquijo (Geraldine Zivic), y a partir de ese momento se empieza a descubrir poco a poco por qué se encuentran estas dos mujeres, contó la actriz.
“Las historias de tres mujeres, Victoria, Eva y Mabel (Rami Herrera), se entrelazan de una manera muy inesperada. No puedo revelar más, el espectador tiene que ir descubriendo, lo que sí puedo decir es que se llevarán muchas sorpresas. Nunca había tenido un personaje tan retador y complejo en mi carrera. Es como si a una actriz la llevaran a un parque de diversiones. Eso fue ese personaje para mí, como si me hubieran dejado en un parque de diversiones. Toda la trayectoria del personaje fue absolutamente fascinante. Es un personaje profundo, complejo, rico en detalles”, describió.
“Eva es cinco mujeres en una. Es una mujer que tiene bastantes cosas pendientes por resolver, que ha tenido una vida difícil, que se está buscando permanentemente en ella y en los otros. Es una mujer que tiene varios trastornos, con una historia y un pasado que le pesa, que le duele, que la hiere constantemente. Ahí está esa herida sangrando y eso la lleva a tomar decisiones bastantes fuertes que cambian la vida de quienes se encuentran con ella. Y ese primer encuentro con Victoria es el gran huracán que desatada todo”, agregó sobre la trama que dirige Rodrigo Lalinde.
Además de los desafíos físicos y emocionales que le impuso desarrollar ese personaje, también tuvo que indagar sobre el funcionamiento de la mente humana.
“Fue un personaje con unos retos físicos, emocionales y mentales tremendamente complejos. Para construir este personaje tuve que hacer investigación con dos psiquiatras que estuvieron conmigo, acompañándome, guiándome acerca de un montón de información sobre el comportamiento de personas con diferentes trastornos de personalidad y el funcionamiento del cerebro humano a profundidad”, reveló.
“Y fue muy interesante, pero también muy complejo de entender y de actuar. Fue un personaje tremendamente exigente en lo emocional. No hay una sola escena que pueda decir que fue fácil de transitar, todas tenían muchas capas. Así que fue casi como una tesis actoral poder transitar todo lo que exigía el personaje. Y aprendí bastante en esa investigación de la mente y el comportamiento humano, de cómo nos pueden afectar las cosas que vivimos en la primera etapa de la vida. Fue un aprendizaje enorme”.
Asimismo, comentó sobre los desafíos que enfrentaron en el set como equipo a la hora de hacer valer el guion.
“Y los retos que enfrentamos en el set también fueron bastante grandes, porque no estábamos contando una historia convencional ni predecible, entonces siempre estábamos desafiándonos como equipo para poder hacerle justicia a lo que estaba escrito y contar la historia de una manera que enganchara al espectador”, recordó.
“Como actriz, me puse el reto de siempre estar en disociación, o sea, yo tenía un libreto y en la hoja de al lado en blanco ponía lo que iba a pensar en la escena, de manera tal que siempre estaba pensando algo diferente a lo que estaba haciendo o diciendo. Para mí fue súper difícil hacer este ejercicio de disociación todos los días en el set. Así que era como un gimnasio mental diario. Creo que es un aprendizaje que me llevo para el resto de mi vida, más allá de mi carrera. La próxima vez que me enfrente a un personaje, lo haré de manera distinta”, agregó.
Adentrarse en el mundo ficticio del personaje también le dejó enseñanzas que le sirven para crecer como persona.
“Como ser humano, aprendí mucho sobre la salud mental y lo que es ponerse en los zapatos del otro. Es fácil juzgar, hablamos muy superficialmente de los trastornos mentales, de la depresión, de lo que es un ataque de pánico o de ansiedad. Desde la pandemia hemos tratado de hablar de ese tema, pero ha sido de manera superficial. Y ahondar en el manejo o el descontrol de las emociones, hablar de qué significa tener un trastorno, de las causas y cuáles pueden ser las consecuencias en el comportamiento, te hacen ver las cosas desde otra perspectiva, sin juzgar. Son temas muy profundos del ser humano, emocional y genéticamente. Y aprendí mucho sobre eso tan interesante y complejo, pero al mismo tiempo fascinante como la serie”.
Majida Issa fue merecedora del Premio Platino a la mejor actriz por su papel principal en Noticia de un secuestro, de Prime Video. La también cantante protagonizó para Netflix La Guzmán, serie que explora la vida de Alejandra Guzmán. Otro de sus personajes más recordados es La Diabla, en Sin senos no hay paraíso.
Recientemente estrenó en su país El bolero de Rubén, la primera película que produce, además de actuar.
En la música destaca como parte del cuarteto Planchando el Despecho, que surgió hace 10 años y ahora está de gira por Colombia. Su álbum de mariachi Nocturna (2018) le valió una nominación al Latin Grammy.