Lionel Messi y Ángel di María constituyen dos vidas paralelas. Dos trayectorias de esfuerzo y recompensas. Ambos son de la ciudad de Rosario, donde se dice que se encuentran las muchachas más bonitas y de donde han surgido algunos de los jugadores más fantásticos en la historia del fútbol de Argentina.
Messi tiene 34 años y Di María 33. Ambos empezaron sus andanzas en el balompié profesional casi al mismo tiempo, el primero en el 2004 con el Barcelona y el segundo un año después con Rosario Central. Desde entonces han encandilado a los fanáticos más exigentes y se han conjurado para brindar emociones incomparables.
No es improbable que ambos terminen su trayectoria llena de luces en el mismo club, el Paris Saint Germain, en el que Messi debutó el pasado domingo 29 de agosto y Di María en el 2015; y quizás con la selección argentina en el Mundial de Catar 2022.
“Messi y Di María proceden de la célebre escuela futbolística rosarina y sus trayectorias han tenido un gran paralelismo”, afirmó el prestigioso periodista argentino Jorge Barraza, de El Tiempo de Bogotá y El Universo de Guayaquil. “Ambos siempre han estado en grandes clubes y han convertido goles decisivos. Messi es un tocador que se asocia y Di María es un jugador que aprovecha el espacio”.
Algunas de las acciones más grandes de este par de jugadores de antología han permitido al fútbol argentino alcanzar logros históricos.
Ambos fueron campeones mundiales en la categoría Sub-20, Messi en Holanda 2005 y Di María en Canadá 2007.
Luego, todo lo que consiguió Argentina en el fútbol fue con ellos dos en la cancha: el oro olímpico en Beijing 2008, el subtítulo en el Mundial de Brasil 2014 y la Copa América -que era tan esquiva para la albiceleste que se había convertido en una obsesión-, en Brasil 2021.
La selección mayor argentina no obtenía un título desde hacía 28 años, cuando conquistó por última vez en 1993 el campeonato de selecciones más antiguo del mundo.
Por eso resulta tan significativo para Messi y Di María la disputa de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de Catar 2022.
“La última oportunidad de ambos para ganar una Copa del Mundo será precisamente en Catar”, agregó Barraza. “Para entonces, Messi tendrá 35 años y medio y Di María estará a solo tres meses de los 35. Con 39 años resulta difícil que lleguen al Mundial del 2026 en Estados Unidos, Canadá y México. Por eso harán el máximo esfuerzo para clasificar a Catar. Ambos tienen un gen competitivo que se expresa en su preparación, su entrega en la cancha, el cuidado en su vida personal y que se refleja en su rendimiento al más alto nivel en la elite del fútbol profesional”.
Entre la primera quincena de septiembre y la primera quincena de noviembre Argentina y los demás equipos sudamericanos tendrán un demoledor calendario de ocho partidos por cabeza, que serán decisivos para la clasificación, es decir, 24 puntos que podrían llevar a cualquiera de ellos a la próxima cita máxima del esférico.
Barraza considera que Messi es el mejor futbolista de todos los tiempos. Y para ello hace una rápido reseña del astro albiceleste.
“Hace 17 años Messi juega a un altísimo nivel sin sufrir baches y lleva marcados cerca de 750 goles en partidos oficiales”, explicó Barraza. “Tiene el sentido del gol de Pelé, la habilidad de Maradona y el cerebro de Ricardo Bochini. En mi concepto, los cuatro mejores futbolistas de todos los tiempos, ese póker que esta por encima de todos, lo conforman Pelé, Alfredo DiStéfano, Maradona y Messi”.
Por ahora, Messi y Di María de seguro pondrán el alma en estas fechas de las eliminatorias, porque saben que ellas son el trampolín para llegar a un Mundial, que más que probablemente será el último para ellos y, también, el último chance para ceñirse la corona de campeones del mundo, el único trofeo que falta en sus espectaculares trayectorias, para decir adiós al fútbol con todos los laureles y, además, juntos como ha sido casi todo su paso por el balompié.