Una nueva serie dramática sobre uno de los casos más polémicos del béisbol está en desarrollo. Según reveló en exclusiva Deadline, la productora independiente Golden Possum, dirigida por Naomi Harvey, adquirió los derechos de vida exclusivos de Julio Estrada, el entrenador cubano condenado por su papel en una operación para introducir jugadores de Cuba a Estados Unidos con el fin de que firmaran contratos en las Grandes Ligas.
El proyecto —aún sin título— relatará el ascenso y la caída de Estrada, desde sus inicios como un respetado formador de jóvenes peloteros en Miami, hasta su condena por conspiración y tráfico en 2017. Estrada fue sentenciado a cinco años de prisión, mientras que el agente deportivo Bartolo Hernández recibió cuatro.
El caso involucró a figuras conocidas como Leonys Martín, entonces jardinero de los Texas Rangers, y José Abreu, estrella de los Chicago White Sox. Según los fiscales, Estrada se quedaba con un porcentaje de los contratos millonarios de los jugadores a cambio de ayudarlos a escapar de Cuba y obtener residencia en otros países antes de llegar a la MLB.
Ya en libertad, Estrada mantiene que fue convertido en chivo expiatorio:
“El mayor engaño del gobierno estadounidense fue decir que nuestro caso serviría como ejemplo para disuadir a futuros peloteros cubanos, pero más de 200 han firmado desde entonces. Nada ha cambiado. Nunca pensé que me llamarían ‘traficante’. Por primera vez quiero que la gente escuche mi versión”, declaró a Deadline.
La creadora Naomi Harvey destacó que el relato de Estrada permite explorar “el mundo secreto detrás de las luces del béisbol”, donde carteles, intermediarios y franquicias multimillonarias se cruzan en una red de intereses y sueños rotos.
“No es solo una historia deportiva —afirmó Harvey—, es una historia sobre la lealtad, la corrupción y el verdadero precio del sueño americano.”
Con acceso exclusivo a los archivos personales y materiales judiciales de Estrada, la serie promete ofrecer una mirada sin precedentes al lado oscuro del negocio del béisbol y al costo humano de perseguir la gloria en las Grandes Ligas.
FUENTE: Con información de Deadline