Sam Bankman-Fried regresó a la cárcel el lunes después que un juez suspendió bruscamente la audiencia en la que se prevería que el fundador de la plataforma de criptomonedas FTX desistiría de objetar su extradición a Estados Unidos.
Medios de prensa locales informaron que el abogado de Bankman-Fried pidió la suspensión porque no se le había consultado debidamente.
Se preveía que Bankman-Fried diría al juez Shaka Servillea que no disputaría el pedido de extradición a EEUU, donde se le imputa de cargos penales y civiles por estafa mediante la plataforma de criptomonedas FTX.
Eye Witness News Bahamas informó que Bankman-Fried regresaba a la cárcel, ya que los fiscales y el juez Servillea calificaron la audiencia de pérdida de tiempo.
Hace una semana, los abogados de Bankman-Fried habían dicho que pensaban disputar la extradición. Se había convocado a una audiencia de extradición para el 8 de febrero, pero su cambio de actitud podría acelerar el trámite de enviarlo a EEUU.
Las autoridades de Bahamas arrestaron a Bankman-Fried el lunes pasado por pedido del gobierno de EEUU. Los fiscales estadounidenses alegan que cumplió un papel central en el derrumbe FTX y ocultó los problemas de la empresa al público y los inversores.
La Comisión de Bolsa y Valores dijo que Bankman-Fried utilizó ilegalmente el dinero de los inversores para comprar propiedades inmobiliarias para sí y su familia. De ser hallado culpable, podría pasar el resto de su vida en la cárcel.
Bankman-Fried arribó a la corte en una van negra con letrero de Correccionales escoltado por vehículos policiales. La policía lo condujo rápidamente a una puerta trasera del tribunal.
Previamente, un puñado de personas que dijeron ser entusiastas de las criptomonedas o clientes de FTX que perdieron dinero llegaron a la Corte para presenciar la audiencia. Un hombre gritó, “Sam es un fraude”, cuando entraba a la sala.