NUEVA YORK — Mahmoud Khalil, uno de los promotores de las violentas protestas propalestinas en los campus de Estados Unidos en apoyo al grupo terrorista Hamàs, demandó el jueves al gobierno de Donald Trump por 20 millones de dólares por su arresto y detención a manos de agentes migratorios.
Residente legal permanente en Estados Unidos y casado con una ciudadana estadounidense, Khalil estuvo bajo custodia tras su arresto en marzo por liderar las protestas en los recintos universitarios donde agredieron a estudiantes judíos y causaron destrozos.
Fue detenido el 8 de ese mes en una residencia de la Universidad de Columbia en Nueva York, donde se graduó con el apoyo de EEUU. Luego fue trasladado a un centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el estado de Luisiana (sureste).
Y fue liberado bajo fianza el mes pasado, tras la orden de un juez.
"La administración llevó adelante su plan ilegal de arrestar, detener y deportar al Sr. Khalil 'de una manera calculada para aterrorizarle a él y a su familia'", según la demanda del Centro de Derechos Constitucionales, organización que respalda al activista pro Hamàs, de 30 años, pese a los daños causados por su activismo durante las protestas y el terror causado a estudiantes de origen hebreo.
Khalil sufrió "graves trastornos emocionales, dificultades económicas, (y) daños a su reputación", según la demanda.
"Amenaza a la seguridad nacional"
El estudiante de la prestigiosa Universidad de Columbia fue una figura destacada de las protestas estudiantiles contra la guerra de Israel en Gaza, que se originó tras el ataque terrorista de Hamàs a territorio israelí el 7 de octubre de 2023. La masacre dejó un saldo superior a los 1,200 muertos, en su mayoría civiles. Además, los terroristas secuestraron a 255 personas; unos 50 permanecen en manos de Hamàs, entre vivos y muertos.
Para el gobierno de Trump, Mahmoud Khalil representa una amenaza para la seguridad nacional en Estados Unidos.
Fue el primero de una serie de exalumnos detenidos por su violenta participación en las protestas que sacudieron las casas de estudio del país, argumentando que era para "pedir el fin de la guerra".
Primer paso
Khalil calificó la demanda de "primer paso hacia la rendición de cuentas".
"Nada puede devolverme los 104 días que me robaron. El trauma, la separación de mi esposa, el nacimiento de mi primer hijo que me vi obligado a perder", dijo en el comunicado el cabecilla propalestino.
"Debe haber rendición de cuentas por las retaliaciones políticas y el abuso de poder", lanzó.
La secretaria adjunta del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, dijo que "la administración Trump actuó bien dentro de su autoridad estatutaria y constitucional para detener a Khalil, como lo hace con cualquier extranjero que aboga por la violencia, glorifica y apoya a los terroristas, acosa a los judíos y daña la propiedad".
Más allá de su caso legal, el equipo de Khalil ha expresado "temor" de que pueda sufrir "amenazas" fuera de la detención.
FUENTE: Con informaciòn de AFP / Redacciòn