WASHINGTON — El Congreso de Estados Unidos aprobó la medianoche del lunes un paquete de 900.000 millones de dólares en ayuda por la pandemia que finalmente incluye la entrega de dinero en efectivo a negocios e individuos, así como recursos para vacunar a una nación que enfrenta un repunte en casos y fallecimientos por COVID-19.
El abrumador apoyo que este paquete de ayudas que ha tenido tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes allana el camino para la ratificación de parte del presidente, Donald Trump.
Los legisladores conjuntaron el paquete con un proyecto de ley de gastos por 1,4 billones de dólares y miles de páginas de otros asuntos en un fardo masivo de legislación bipartidista, mientras el Capitolio se alista para concluir sus labores del año.
El paquete de ayudas, presentado el lunes por la tarde, cumplió los trámites parlamentarios en cuestión de horas. El Senado lo aprobó por 92 votos a favor y 6 en contra después de que la Cámara de Representantes lo hiciera también con una gran mayoría, por 359 a favor y 53 en contra.
El proyecto de ley combina fondos para combatir el coronavirus con apoyo financiero para individuos y negocios. Establecería un pago temporal adicional de 300 dólares semanales para los desempleados y un estímulo directo de 600 dólares para la mayoría de los estadounidenses, junto con una nueva ronda de subsidios para las empresas, los restaurantes y los teatros afectados, al igual que dinero para escuelas, proveedores de servicios de salud e inquilinos que enfrentan desahucio.
Tras meses de bloqueo, demócratas y republicanos anunciaron el domingo que habían llegado a un acuerdo de principio sobre un paquete de medidas que comprendía cheques para las familias más debilitadas por la crisis, ayudas a las pequeñas empresas y las escuelas, así como prestaciones por desempleo suplementarias de 300 dólares por semana o una partida para la distribución equitativa de vacunas contra el coronavirus.
Después de la votación de la Cámara de Representantes, los miembros del Senado tenían el imperativo del finalizar el acuerdo y aprobarlo este lunes, en momentos en que la amenaza de un cierre del gobierno federal, o "shutdown", no está del todo excluida.
El Congreso decidió igualmente prolongar hasta el próximo lunes a medianoche la legislación que permite el financiamiento del gobierno federal a corto plazo, por lo que los parlamentarios deberán llegar también a un acuerdo sobre la nueva ley de finanzas.
Mientras tanto, el Senado también se encaminaba a aprobar un proyecto de ley provisional de una semana para evitar un cierre parcial del gobierno a medianoche y darle tiempo a Trump para que firme el amplio proyecto de ley de gastos.
Cheques desde la próxima semana
Antes incluso de la votación de las medidas de ayuda urgente a la economía, el secretario estadounidense del Tesoro, Steven Mnuchin, aseguró el lunes que los cheques de 600 dólares por adulto y por niño, destinados a las familias con mayores dificultades comenzarán a enviarse desde el comienzo de la próxima semana.
Mnuchin celebró igualmente esta ayuda que llega "justo a tiempo para las vacaciones" de fin de año, en declaraciones a la cadena CNBC.
"La gente verá este dinero desde el comienzo de la semana próxima. Será muy rápido", añadió el miembro del gabinete de Donald Trump.
Estas ayudas directas tienen como objetivo sostener el consumo de los hogares y, como consecuencia, el crecimiento. Para las familias con mayores problemas económicos, también habrá para pagar los alquileres.
"Podemos terminar el año con una rara nota optimista", subrayó Schumer mientras la pandemia sigue causando estragos en el país y la cantidad de desempleados no deja de aumentar.
FUENTE: Con información de AFP