Los legisladores demócratas de la Cámara de Representantes pusieron fin este jueves a una sentada que ha durado 24 horas en protesta por la falta de acción de los republicanos para someter a votación medidas que regulen el control de armas en el país.
Bajo el lema "No hay ley, no hay receso", los demócratas tomaron la decisión de permanecer como acto de protesta en el pleno de la Cámara Baja con el objetivo de cancelar las vacaciones por la celebración del 4 de julio si no se somete a voto una legislación que ataje el problema de la violencia armada.
Los republicanos convocaron en la mañana de este jueves el receso, calificando la demanda demócrata de "movimiento publicitario", pero la bancada opositora aseguró que seguirán presionando sobre el tema, con la promesa de realizar actos durante ese tiempo.
"Ahora tenemos que emprender acciones que nos permitan cumplir con nuestro objetivo, que es ganar la votación", dijo la líder de la minoría demócrata Nancy Pelosi, que ha liderado la propuesta a raíz de la masacre de Orlando ocurrida la semana pasada, que causó 49 víctimas mortales y fue la más mortífera del país.
Los demócratas comenzaron una sentada en la Cámara Baja la mañana del miércoles para presionar a los republicanos con el fin de someter a voto varias propuestas que impedirían que los sospechosos de terrorismo puedan comprar armas y, además, expandirían los controles de antecedentes cuando alguien quiera adquirirlas.
En una rueda de prensa, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, reiteró este jueves que no iban a ceder ante los demócratas y criticó su estrategia.
"Podemos estar en desacuerdo sobre políticas, pero haciéndolo dentro de los límites del orden y el respeto por el sistema, de lo contrario todo se desmorona", dijo Ryan.
"No vamos a permitir que trucos como este nos impidan abordar los asuntos del pueblo", agregó el presidente de la Cámara Baja.
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