NUEVA YORK — Los precios del crudo continuaron su desplome el martes y las acciones de la Bolsa de Valores de Nueva York cayeron a su peor nivel en varias semanas a medida que los mercados bursátiles de todo el mundo resintieron las inquietudes en torno al desastre económico causado por el coronavirus.
La atención del mercado se centró nuevamente en el crudo, cuyos precios se han desplomado debido a la poca cantidad de personas que conducen o toman vuelos, y al cierre generalizado de las fábricas en medio de órdenes de confinamiento.
Se tiene previsto que la demanda de crudo a nivel mundial caiga a niveles que no se han visto desde mediados de la década de 1990. Al mismo tiempo, los productores de petróleo no pueden reducir su extracción lo suficientemente rápido y todo ese crudo adicional está llenando los depósitos de almacenamiento.
El precio por barril del crudo estadounidense de referencia para entrega en junio cayó 43% a 11.57 dólares. Esa es la parte del mercado en la que se han enfocado los corredores de petróleo, comercializando de forma más activa.
Para el petróleo a entregarse el mes siguiente, que es cuando los depósitos de almacenamiento podrían llegar al límite, el costo por barril se mantuvo en 10,01 dólares. En la víspera, cayó por debajo del cero por primera vez, lo que significó que los inversores pagaron a otros para deshacerse del crudo y del problema de almacenamiento.
Los analistas consideran que los precios del crudo estadounidense para entregarse en junio y en los meses posteriores es más cercano al precio “real” del petróleo, junto con los precios de crudos internacionales, los cuales no cayeron por debajo del cero, en parte debido a que sus problemas de almacenamiento no son tan apremiantes. Sin embargo, también registraron pérdidas el martes por la misma cuestión: Una economía incapacitada por el brote del coronavirus no necesita consumir tanto combustible.
La mezcla Brent, de referencia internacional, para entrega en junio cedió 24,4% a 19,33 dólares por barril.
El frágil mercado petrolero ayudó a lastrar el precio de las acciones a su segundo día consecutivo de pérdidas. El índice S&P 500 bajó 3,1%, su peor caída desde el 1 de abril. El desplome se produjo luego de pérdidas similares en Europa y Asia.
El S&P 500 cayó 86,60 puntos para cerrar en 2.736,56.
El promedio industrial Dow Jones perdió 631,56 unidades, o 2,7%, para situarse en 23.018,88. El compuesto Nasdaq cedió 297,50 enteros, o 3,5%, para terminar en 8.263,23.
En otra señal de preocupación que se cierne sobre los mercados, los rendimientos del Tesoro volvieron a caer.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años bajó a 0,56%, respecto al 0,62% de la jornada previa, lo que significa que los inversionistas están dispuestos a recibir menos a cambio de refugiarse en la seguridad de los bonos del gobierno estadounidense.
FUENTE: AP