MIAMI.- El exembajador de EEUU, Manuel Rocha, confirmó que se declarará culpable de acusaciones de ser agente de Cuba durante décadas, lo que pondría fin inesperadamente rápido a un caso que según la fiscalía fue una de las traiciones más osadas en la historia del servicio diplomático estadounidense.
Rocha, de 73 años, le dijo a un juez federal que admitirá cargos federales de conspirar para ser agente de un gobierno extranjero, acusaciones que podrían dejarlo tras las rejas durante años. Su abogado indicó que la fiscalía ha acordado una sentencia, pero ésta no fue divulgada en el tribunal el jueves.
El 12 de abril, admitirá oficialmente su culpabilidad ante la jueza Beth Bloom, que le comunicará entonces su sentencia.
La labor de Rocha fue "una de las infiltraciones de mayor alcance y duración en el gobierno de Estados Unidos por parte de un agente extranjero", dijo el fiscal general Merrick B. Garland en un comunicado publicado en diciembre tras el arresto del presunto espía.
Según la denuncia, Rocha, un estadounidense de 73 años nacido en Colombia, "apoyó en secreto a la República de Cuba y su misión clandestina de recopilación de información de inteligencia contra Estados Unidos" desde alrededor de 1981 hasta su detención.
Para ayudar al gobierno comunista de Cuba, enemigo acérrimo de Washington, el acusado obtuvo un empleo en el Departamento de Estado entre 1981 y 2002.
Ahí ocupó cargos que le dieron acceso a información no pública de alto nivel, así como la capacidad de influir en la política exterior estadounidense, según el fiscal general.
Entre 1999 y mediados de 2002, fue embajador estadounidense en La Paz, donde causó una gran polémica al amenazar con retirar la ayuda estadounidense a la guerra boliviana contra las drogas, si el izquierdista y exsindicalista cocalero Evo Morales ganaba las elecciones.
Rocha admitió haber trabajado para Cuba durante "40 años" en varias reuniones mantenidas en 2022 y 2023 con un agente encubierto del FBI que se hacía pasar por un representante de la Dirección General de Inteligencia de Cuba.
La Fiscalía lo acusa de conspirar para actuar como agente de un gobierno extranjero; actuar como agente de un gobierno extranjero sin el consentimiento previo de su administración; y utilizar un pasaporte estadounidense obtenido mediante declaraciones falsas.
Varios casos de espionaje han empañado las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, enfrentados desde la revolución comunista de la isla en 1959, en plena Guerra Fría.
La administración de Joe Biden extendió por un año más el estado de emergencia nacional con respecto a Cuba, manteniendo así la prohibición de acceso a los puertos cubanos para barcos bajo la bandera de Estados Unidos. Esta medida, que ha sido prorrogada por cada administración desde 1996, se originó como respuesta al derribo por parte del régimen cubano de dos avionetas de Hermanos al Rescate.
La decisión, según reseña Diario de Cuba, anunciada mediante una declaración firmada por Biden y publicada en el Registro Federal para su comunicación al Congreso de Estados Unidos, mantiene la continuidad del estado de emergencia nacional establecido el 1 de marzo de 1996 mediante la Proclamación 6867.
Este estado de emergencia se estableció "para hacer frente a la perturbación o amenaza de perturbación de las relaciones internacionales causada por la destrucción por parte del Gobierno cubano el 24 de febrero de 1996 de dos aviones civiles desarmados registrados en los Estados Unidos en el espacio aéreo al norte de Cuba".
Además, en 2004, esta normativa se amplió con la Proclamación 7757, que anunció la negación de cualquier apoyo monetario y material al régimen cubano.
FUENTE: Con información de AP/Diario de Cuba