Los servicios de Inteligencia de Estados Unidos han concluido que el coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan "no fue fabricado por el ser humano o modificado genéticamente", por lo que las investigaciones se centran ahora en un origen animal o un posible "accidente" en un laboratorio.
La oficina del Director de Inteligencia Nacional informó en un comunicado de que hay un "amplio consenso científico" que avala que el virus no surgió de forma intencionada.
La comunidad de Inteligencia se compromete a seguir examinando de forma "rigurosa" la información que surja sobre esta crisis para determinar "si el brote comenzó por contacto con animales infectados o si fue el resultado de un accidente en un laboratorio de Wuhan".
El presidente Donald Trump ha criticado el actuar de China, que asegura informó tardíamente al mundo sobre la presencia del virus, igualmente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que tardó en declarar que el contagio se había convertido en una pandemia. Varios países, entre ellos Australia, demandan una investigación independiente sobre la responsabilidad de China que no ha aclarado sobre la propagación de la enfermedad que ha causado más de tres millones de contagios y más de 227 mil muertos en el mundo.
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, agregó que “el simple hecho de que no conozcamos las repuestas —de que China no ha compartido las respuestas— creo que resulta muy revelador”.
Pompeo también presionó a China para que dé acceso a expertos del extranjero a su laboratorio “a fin de que podamos determinar precisamente dónde empezó este virus”.
Estados Unidos estaba otorgando financiamiento al laboratorio en Wuhan para sus investigaciones sobre el coronavirus, informó Michael Morell, exdirector interino de la CIA y actual subdirector.
Añadió que existen unos cables del Departamento de Estado que indican que los funcionarios estadounidenses estaban inquietos sobre las medidas de seguridad en esta instalación.
Si resultara cierto que el virus emanó de ese laboratorio, eso habla mal de China, pero también de Estados Unidos por dar financiamiento a un laboratorio con condiciones cuestionables, declaró Morell el jueves durante una teleconferencia auspiciada por el Instituto Michael V. Hayden de Política Internacional en la Universidad George Mason.
Los científicos coinciden en que el virus se presentaba de forma natural en los murciélagos. Aun así, Pompeo y otros han culpado a un instituto operado por la Academia China de Ciencias, que ha realizado investigaciones innovadoras para rastrear el origen posible del virus síndrome respiratorio agudo grave (SARS), descubriendo nuevos virus en murciélagos y descifrando cómo pueden ser propagados a las personas.
El gobierno chino dijo el jueves que las denuncias de que el coronavirus fue liberado por un laboratorio son “infundadas y fabricadas”.
El director de la institución Yuan Zhiming, dijo que ésta aplica estrictamente las normas de bioseguridad que impiden la liberación de cualquier patógeno, informó el vocero de la cancillería Geng Shuang.
“Quiero reiterar que el origen del virus es un problema científico complejo, que deben estudiar los científicos y los profesionales”, dijo Geng.
En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus provoca síntomas de leves a moderados que desaparecen en dos a tres semanas. En algunas personas, sobre todos los adultos mayores y las que padecen trastornos de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves, como la neumonía, e incluso la muerte. La mayoría de la gente se recupera.
Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia y acumula más de un millón de los 3,2 millones de positivos confirmados a nivel mundial. El país norteamericano suma ya más de 61.000 fallecidos, 18.000 de ellos solo en la ciudad de Nueva York.
FUENTE: Con información de AP y Europa Press