El Presidente, ante la presión de los activistas y su propio partido, ha pedido suavizar las actuaciones migratorias, pero dentro del marco legislativo
Deportador en jefe. Así de categórica se mostró Janet Murguía, presidenta de La Raza, hace unos días para calificar al presidente estadounidense que está al borde de superar cualquier tipo de récord en número de deportaciones: dos millones en seis años.
Puede que fuera este calificativo o la proximidad de las elecciones de noviembre -los hispanos han comenzado a retirar su apoyo a Barack Obama-, pero lo cierto es que el que fuera aupado hasta Washington con una mayoría abrumadora del voto latino realizó un gesto de buena voluntad para suavizar las políticas de deportaciones.
","Cierto que no hay nada aún ni sobre el papel ni firmado. Pero Obama acaba de pedir al Secretario de Seguridad Nacional (DHS), Jeh Johnson, que se estudien las posibles vías para poder aplicar la legislación vigente"de una manera más humana". Pero sin saltarse la ley.
","Esta sorpresiva iniciativa se ha producido precisamente cuando hace una semana el propio Obama sostenía que se encontraba al límite de sus poderes presidenciales y reconocía su supuesta imposibilidad para avanzar en la dirección que le han estado exigiendo numerosos colectivos proinmigrantes desde que la reforma migratoria parece que no dejará de dormir el sueño de los justos en el pleno de la Cámara de Representantes. Parece que ha cambiado de opinión.
","Y lo hizo justo tras reunirse este jueves por la noche con varios miembros de su partido que se han mostrado muy contrariados con su falta de acción ante el drama de la separación de familias, entre ellos los congresistas Rubén Hinojosa y Luis Gutiérrez.
","Dudas sobre su aplicación
","u00bfCómo implementará su deseo? Es una incógnita. Según Marshall Fitz, especialista en inmigración del progresista Center for American Progress u201ces muy pronto para decir qué hará finalmente el Presidente". Para esta analista,"la pregunta es si [la solución] vendrá del Congreso o del Presidente".
","En todo caso ya el Partido Republicano, por boca de Brendan Buck, portavoz del líder John Boehner, ha advertido de que la extralimitación del Presidente (en una velada indicación de que Obama decida saltarse el Congreso y echar mano de una orden ejecutiva) supondrá una mayor barrera para ver un texto migratorio apoyado por las Cámaras".
","Precisamente, ésa es la idea que comparte Israel Ortega, editor del portal Libertad.org, de la conservadora Fundación Heritage, para quien u201cesto complica mucho más la posibilidad de una reforma migratoria porque falta una mejor aplicación de la ley [existente] antes de proceder y esto complica la situación".
","Una valoración que contrasta con la de Laura Vázquez, de la Raza, la misma asociación desde la que se le calificó como"deportador en jefe", y que considera que este paso"es algo positivo ya que hay que revisar las políticas existentes, como hemos reclamado desde La Raza por mucho tiempo".
","u00bfUna estrategia?
","La duda ha invadido a muchos: u00bfes una nueva estrategia política para recuperar la cada vez más deteriorada imagen de la que disfruta Obama entre los latinos?"No sabemos cuál -acota Vázquez- es la razón por lo que ha dicho lo que ha dicho pero desde luego está relacionado con los miembros de la comunidad que han pedido actuar, así como los del Senado, que ya han votado por una reforma migratoria y el caucus hispano. Todo ha influido".
","Desde Heritage existe una posición más clara:"Sí existe un interés electoralista -sostiene Ortega-, pero no sólo para noviembre, sino a más largo plazo, porque también el voto latino va a pesar en muchos estados en las elecciones presidenciales de 2016". Además, y según este analista conservador, el Presidente con este anuncio conseguirá que"muchos activistas le den más tiempo al Presidente para buscar una reforma", si bien es escéptico en el resultado real:"Las encuestas señalan que la economía y el desempleo es la máxima prioridad para la población hispana".
","Una visión muy alejada del especialista Fitz, quien responsabiliza exclusivamente a los conservadores del bloqueo de la reforma en el Congreso, por lo que justifica que Obama"no está actuando por una cuestión de rédito político sino que está respondiendo a una crisis seria en este país, una que ha alcanzado un punto crítico". Por eso, anuncia lo que él casi considera como algo inevitable:"Si continúan evitándolo, el Presidente no tendrá más remedio que usar su amplio poder ejecutivo para actuar en la crisis de las deportaciones".