GUANGZHOU — La secretaria del Tesoro de Estados Unidos Janet Yellen reclamó el viernes en China "igualdad de condiciones" para las firmas de ambos países y alertó que los subsidios industriales de Pekín amenazaban este equilibrio.
La secretaria del Tesoro Janet Yellen dijo que las prácticas chinas están inclinando el campo de juego en perjuicio de trabajadores y compañías estadounidenses
GUANGZHOU — La secretaria del Tesoro de Estados Unidos Janet Yellen reclamó el viernes en China "igualdad de condiciones" para las firmas de ambos países y alertó que los subsidios industriales de Pekín amenazaban este equilibrio.
La funcionaria estadounidense pidió a China encarar la capacidad excesiva de su manufactura, diciendo que ello amenaza con causar trastornos económicos globales, y crear condiciones justas de competencia para compañías y trabajadores estadounidenses.
Al iniciar una visita de cinco días a una de las mayores zonas industriales y exportadoras de China, Yellen mencionó lo que Estados Unidos considera prácticas comerciales injustas en sus reuniones con funcionarios chinos.
“Estados Unidos busca una relación económica saludable con China que beneficie a ambas partes”, declaró Yellen antes de reunirse con el viceprimer ministro chino He Lifeng, el gobernador del banco central y otros funcionarios en la ciudad sureña de Guangzhou. “Pero una relación saludable debe ofrecer un campo de juego equitativo para compañías y trabajadores en ambos países”.
Poco antes, en un evento patrocinado por la Cámara de Comercio de Estados Unidos-China, dijo que “las prácticas chinas ... están inclinando el campo de juego en perjuicio de trabajadores y compañías estadounidenses”.
El viceprimer ministro chino, en declaraciones a la prensa, no habló de aspectos específicos, pero afirmó que ambas partes “deben responder apropiadamente a las inquietudes de la otra parte”.
Arriba en la agenda de Yellen está la sobrecapacidad de la manufactura china. Los subsidios y otros créditos han llevado a los fabricantes de paneles solares y vehículos eléctricos en China a invertir en fábricas, creando una capacidad de manufactura mucho mayor a lo que el mercado doméstico puede absorber.
La escala masiva de la producción ha deprimido los costos y ha provocado una guerra de precios en el mundo de las tecnologías verdes, lo que beneficia a consumidores y a los esfuerzos de reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Pero los gobiernos occidentales temen que ese exceso inundará sus mercados con exportaciones baratas, amenazando empleos en Estados Unidos y Europa.
Yellen, la primera miembro del gabinete en visitar China desde que el presidente Joe Biden y el líder chino Xi Jinping se reunieron en noviembre, afirmó que es importante que China y Estados Unidos tengan una comunicación abierta y directa en las áreas en que discrepan.
Yellen insistió en que Estados Unidos quiere "una relación económica sana" con China.
Pero advirtió que esto requiere "igualdad de condiciones de competencia para las empresas estadounidenses" y "una comunicación abierta y directa sobre los campos de discrepancia".
"Esto incluye la cuestión de la sobrecapacidad industrial de China: Estados Unidos y otros países están preocupados de su posible propagación mundial", dijo la responsable de finanzas de la administración Joe Biden.
Pese a estas discrepancias, ambas potencias parecen comprometidas a continuar con la estabilización de sus relaciones después de años con múltiples puntos de fricción comercial, geopolítica y tecnológica.
El secretario de Estado, Antony Blinken, también tiene previsto viajar a China en las próximas semanas, en otra señal de la recuperación de las relaciones entre ambos países.
FUENTE: Con información de AFP y AP