SONIA SCHOTT
@schottv
Las interrogantes ahora son: ¿Cambiarán Rubio o Bush su posición? ¿Quiénes serán los próximos en unirse a Ben Carson y Chris Christie? y ¿Cuánto podrá ceder Trump?, si se toma en cuenta que su éxito con los votantes se ha visto alimentado, precisamente, por ese rechazo a todo lo políticamente correcto
SONIA SCHOTT
@schottv
El gran Partido Republicano, que produjo a Ronald Reagan, considerado una de las figuras más prominentes y exitosas de la historia política reciente de Estados Unidos, ahora se enfrenta a lo inevitable: un fenómeno recurrente de la anti política, que pretende sacudir sus máximos valores y hacerse, con buenas posibilidades de triunfo, de la más alta magistratura del Estado, aun cuando nunca ha sido tomado en serio por su ausencia de “toque presidencial”, lo que incluso le ha valido ser el blanco de las burlas de todos, empezando por los miembros de su propia organización.
Mientras tanto, Donald Trump, al margen de esta coyuntura, se encuentra preparando al país y al resto del mundo para “Trump en La Casa Blanca”, mientras el establishment republicano, que todavía duda de la viabilidad de un rey del entretenimiento transformado en líder político del mundo libre, y por la vía rápida, ha fracasado en su intento en detenerlo y está atrapado con él.
Un “golpe de estado” para derrocarlo, haciendo oídos sordos a las preferencias populares que lo han llevado a los primeros lugares, podría significar una rebelión de marca mayor entre seguidores, que solo jugaría a favor de los rivales demócratas.
Ya parece tarde para un independiente y así, figuras como Paul Ryan, abrumados con la idea de lo irremediable, le han hecho saber a Trump que debe hacer su mejor esfuerzo para parecerse a un Abraham Lincoln o un Ronald Reagan, para apelar a la sensibilidad de esos republicanos, que ignorando el riesgo de resquebrajar todavía más a su partido y provocar un verdadero cisma, le han dado la espalda.
Las interrogantes ahora son: ¿Cambiarán Rubio o Bush su posición? ¿Quiénes serán los próximos en unirse a Ben Carson y Chris Christie? y ¿Cuánto podrá ceder Trump? tomando en cuenta que su éxito con los votantes se ha visto alimentado, precisamente, por ese rechazo a todo lo políticamente correcto.
Tal vez a estas alturas, los republicanos no tendrán más remedio que consolarse con la idea de que, después de todo, en lo más profundo de este fenómeno llamado Donald Trump, puede que haya otro Reagan esperando la oportunidad de salir y sorprender a todos.
En su momento, Reagan fue un actor de Hollywood que no aparentaba al principio tener las cualidades presidenciales, a pesar de haber sido un gobernador exitoso. Sin embargo, resultó ser un gran presidente, especialmente cuando los tiempos requerían de un liderazgo fuerte en el mundo.
En todo caso, poniendo las barbas en remojo, líderes mundiales de la talla de David Cameron han empezado a cambiar el tono sobre Trump, admitiendo que quien es capaz de sobrevivir unas primarias tan difíciles, merece todo el respeto.
Paralelamente Hillary Clinton, ha visto una buena oportunidad de consolidar sus ganancias electorales a costa de las divisiones en torno a la figura de Trump, especialmente entre las mujeres que junto a la población hispana, se han convertido en una interesante pieza en estas elecciones.
Sin embargo, a pesar de que no hace mucho tiempo los demócratas se sentían seguros de que lo mejor que le podía pasar a Hillary era un Trump candidato, ahora no parecen tan seguros porque no parece tan fácil vencer la impredecible personalidad de este fenómeno político, producto de los nuevos tiempos que se avecinan.