Ciudadanos votando en la elección legislativa de Estados Unidos el martes 8 de noviembre de 2022, en una estación de bomberos en Hialeah, Florida.
AP /Lynne SladkyMIAMI.- Un juez federal bloqueó partes de la nueva ley electoral refrendada por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, tras señalar que la normativa podría considerarse “el último ataque en el estado al derecho al voto”.
La ley, promulgada en mayo, introdujo, entre otras cosas, una serie de cambios en el sistema electoral de Florida, relacionados con el registro de votantes de “terceros”, y prohíbe a quien no sea ciudadano estadounidense “recopilar o manejar” la inscripción de personas en el padrón electoral.
El gobernador DeSantis y otros líderes republicanos estatales que promovieron la legislación, argumentaron que la ley era necesaria para garantizar la seguridad de las elecciones, y con ello evitar posibles errores en ese proceso.
Sin embargo, Mark Walker, juez principal de distrito de EEUU, emitió una orden preliminar que bloquea secciones de la ley, con lo que se alineó a grupos como la NAACP, la Liga de Mujeres Votantes de Florida y la Federación Hispana, quienes sostienen que los cambios son “inconstitucionales”.
El fallo deja sin efecto, al menos por el momento, el requerimiento de que los grupos de registro de votantes deben presentar una “afirmación de que cada persona que recoja o maneje solicitudes de registro de votantes en nombre de la organización de registro de votantes de terceros es ciudadano de los Estados Unidos de América”.
Según la ley, esos grupos podrían enfrentar una multa de 50.000 dólares por cada persona no ciudadana que recopile o maneje solicitudes. No obstante, Walker respaldó los argumentos de los demandantes de que esta restricción violaría derechos constitucionales.
"Florida puede, por supuesto, regular las elecciones, incluido el proceso de registro de votantes", escribió Walker. “Cuando el poder del gobierno estatal amenaza con extenderse más allá de los límites constitucionales y erosionar los derechos individuales, el poder judicial federal se convierte en un cortafuegos. El (llamado por DeSantis) Estado Libre de Florida simplemente no puede exceder los límites de la Constitución de los Estados Unidos”.
La ley fue retada en corte por grupos de registro de votantes, bajo el criterio de que estas organizaciones desempeñan un "papel importante" en la inscripción de votantes hispanos y negros.
Durante una audiencia el miércoles, Mohammad Jazil, abogado de la administración DeSantis, argumentó que las personas que no son ciudadanos estadounidenses, como estudiantes de otros países o aquellos con un estatus migratorio legal temporal, "no están vinculadas a la comunidad".
A su juicio, esto podría derivar en que esas personas no entreguen a tiempo las solicitudes de registro electoral.
Otra sección de la normativa bloqueada por Walker haría un delito grave de tercer grado que un trabajador de una organización de registro de votantes “copie la solicitud de un votante o retenga información personal de un votante, como el número de licencia de conducir de Florida, el número de tarjeta de identificación de Florida, número de Seguro Social o firma”.
De acuerdo con el juez federal, que fue nombrado por el entonces presidente Barack Obama, esta parte de la ley es demasiado vaga. En su opinión, este acápite de la norma “deja abierta una amplia gama de lo que podría considerarse información 'personal'”.
No es la primera vez que el juez Walker se opone a legislaciones asociadas al sistema electoral en Florida. En marzo de 2022, el magistrado profirió un fallo que bloqueaba partes de una ley electoral de 2021.
Sin embargo, días después la Corte de Apelaciones del 11° Circuito de los Estados Unidos anuló gran parte de su fallo.
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