MIAMI.- La reciente detención de Joshua Ruiz-Martínez en el condado de Osceola, Florida, ha puesto de manifiesto la importancia de la supervisión parental para garantizar la seguridad de los niños. Ruiz-Martínez, de 32 años, fue arrestado tras una investigación de varios meses relacionada con la muerte de su hija en abril de 2024.
Según las investigaciones, el hombre dejó a su hija en la bañera con el agua corriendo mientras jugaba videojuegos en otra habitación. Aunque inicialmente afirmó haberla dejado sola por tres minutos para preparar un biberón, una revisión de su teléfono y computadora reveló que estuvo ausente por más de diez minutos mientras jugaba en su computadora.
Al regresar al baño, encontró a la niña boca abajo en el agua. Posteriormente, envió mensajes en la aplicación en línea Discord mencionando el incidente, pero afirmó que ocurrió en una piscina.
Cuando se le expuso la evidencia de que había estado jugando en el momento del incidente, Ruiz-Martínez respondió: "¿Maté a mi hija por un juego? Por favor, díganme que no maté a mi hija por un juego", según la orden de arresto.
Ahora, el hombre enfrenta cargos por homicidio agravado de un menor.
Casos similares
Este suceso no es un caso aislado en Florida. En enero, Sanel Canovic y Azra Nikocevic fueron arrestados en Miami Beach después de que se descubriera que sus cinco hijos vivían en condiciones deplorables.
Los menores, de entre seis y doce años, residían en un apartamento sin electricidad, agua corriente ni alimentos adecuados. La intervención de las autoridades se produjo después de que un niño de seis años fuera visto cruzando solo una calle concurrida, lo que llevó a descubrir la situación de abandono en la que se encontraban los niños.
Otro incidente ocurrió en noviembre de 2024 en St. Petersburg, Florida, donde un padre olvidó dejar a su hijo de un año en la guardería después de una cita médica.
El niño permaneció en el automóvil durante todo el día, con temperaturas que alcanzaron los 91 grados Fahrenheit, lo que resultó en su fallecimiento. Este caso resalta cómo un cambio en la rutina diaria puede tener consecuencias devastadoras si no se presta la debida atención.
Delito grave
La negligencia infantil es un delito grave en Florida. Según la ley estatal, se define como la falta de provisión por parte del cuidador de los cuidados, supervisión y servicios necesarios para mantener la salud física y mental del niño, o la falta de protección contra abusos, negligencia o explotación. Las sanciones por negligencia infantil pueden variar desde multas hasta penas de prisión, dependiendo de la gravedad del caso.
Para prevenir estos trágicos incidentes, es esencial que los padres y cuidadores mantengan una supervisión constante y estén plenamente conscientes de las necesidades y el entorno de sus hijos.
Además, se recomienda establecer recordatorios y rutinas que ayuden a garantizar la seguridad de los menores, especialmente en situaciones que se desvían de la rutina habitual.
La colaboración comunitaria también juega un papel vital; estar atentos y reportar comportamientos o situaciones inusuales puede marcar la diferencia en la vida de un niño.