Vecinos de edificio desalojado "¿qué va a pasar con nosotros?"

“La decisión de evacuarnos fue precipitada, debieron dar un poco más de tiempo para que la gente buscara a dónde ir. Nos echaron en poco tiempo”, sostuvo Humberto Echeverri propietario de una unidad del condominio desalojado.

El pasado viernes 2 de julio, el muncipio de Miami Beach dio la orden de evacuar a los 300 residentes del condominio Crestview Towers, debido a que la compañía ingeniera contratada por la asociación concluyó que el edificio era estructuralmente y eléctricamente inseguro, aqunue dijo que las persona podrían permanecer en el lugar mientras se realizaran las reperaciones.

No obstante, el Gobierno muncipal optó por evacuar, según comunicó el ayuntamiento a la prensa. Este condominio se encuentra a unas cinco millas de Champlain Towers, el edificio colapsado en Surfside el pasado 24 de junio.

Echeverri es mecánico de aviación retirado y todos sus ahorros los invirtió en la compra de su apartamento y ahora nadie le brinda información clara sobre su futuro. Él se encuentra alojado en casa de un hermano que cuida a su padre, que tiene 103 años.

“Hace unos años pagaba 300 dólares de asociación, al siguiente la subieron a 400 dólares y los últimos pagos vinieron por 700 dólares. Ellos están haciendo arreglos, pero deberían concentrarse en las reparaciones mayores y nos hubieran evitado pasar por el mal trago del desalojo”, indicó Echeverri.

“Llamo a la asociación y no contestan, llamo a la ciudad tampoco, realmente no sé que cuál es nuestro futuro”.

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Humberto Echeverri, propietario de una unidad del condominio desalojado en North Miami Beach.

CÉSAR MENÉNDEZ/DLA

Por su parte, una vecina que lleva viviendo en el condominio por más de 25 años, que quiso hablar de forma anónima, coincide con Humberto. “Llevamos mucho tiempo con special assessment, pero como cambiamos tanto la junta, se llevan la plata y no hacen nada”.

“Solo hacen cositas por encima. Ahora mismo hay un assessment para arreglar una tuberías en el séptimo piso, donde hicieron unos arreglos pésimos”.

“Esto se venía venir, porque se supone que tenían un aviso desde enero y el viernes nos enteramos que podíamos coger algunas cositas y salir”.

Esta vecina se queja porque dice que hay muchos vecinos “que son personas de bajos recursos que están pagando un hotel, mientras dure el arreglo. Nos dijeron que sería por cinco días, pero la situación se alarga y no tenemos noticias. Solo los rumores que dicen unos y otros”.

“Un vecino dijo que el condominio tenía que mostrarles a la Ciudad la prueba de tener fondos suficientes para acometer las reformas necesaria. Y solo después nos dejarían entrar”.

Según esta vecina, durante el año de la pandemia no hubo reuniones. “En otros lugares se hacían por ZOOM, aquí simplemente las eliminaron”.

“El sábado pasado, alguien que dijo ser el manager de la asociación, que yo no conocía, y sostuvo que el edificio era habitable y que se podían hacer los arreglos necesarios, estando nosotros dentro. También dijo que teníamos un plazo de dos años para llevarlos a cabo”.

“Mi duda es ¿qué va a pasar con nosotros? Y no encuentro respuesta”, preguntó esta vecina que está quedándose junto a marido en casa de su madre.

Algunos inversores, que comienzan a merodear el edificio, mostraron su interés por comprar alguna de estas unidades. “Es el momento, mucha gente se asustará e intentará vender a muy bajo precio”, expresó uno de ellos.

DIARIO LAS AMÉRICAS intentó incluir en el presente escrito el punto de vista de la asociación. Mariel Tollinchi, abogada de la asociación, prometió que hablaría con nosotros, pero hasta el momento de publicar esta nota, no habíamos recibido noticias de ella.

Llamamos al número de teléfono que dispuso la ciudad de North Miami Beach con el propósito de informar a los desplazados y una máquina nos remitió a los teléfonos de la abogada y la asociación.

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@menendezpryce