Amnistía Internacional (AI) planteó este viernes a los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama; Cuba, Raúl Castro; y Argentina, Mauricio Macri, una serie de "importantes preocupaciones en materia de derechos humanos" y los instó a darle prioridad en sus conversaciones.
El organismo defensor de los derechos humanos envió una carta abierta a los tres mandatarios, en el marco de las próximas visitas de Obama a Cuba, el 21 y el 22 de marzo, y seguidamente, el 23 y el 24, a Argentina.
Amnistía señaló a Obama su preocupación a causa de que el plan de cierre del centro de detención en Guantánamo no hace referencia "a la obligación que tiene Estados Unidos de garantizar la rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos, incluidos los delitos de derecho internacional de tortura y desaparición forzada cometidos en las bases y otros lados".
El proyecto, según AI, propone "reubicar a algunas personas para su detención indefinida sin cargos ni juicio en territorio continental estadounidense".
La entidad instó por ello a Obama a que libere de inmediato a todo detenido de Guantánamo contra quien Washington no tenga intención de presentar cargos para que sea juzgado con pleno respeto a las normas internacionales.
También cuestionó la continuidad del embargo económico estadounidense a Cuba, aunque expresó su "satisfacción" por los esfuerzos del Gobierno de restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba.
Pidió en ese sentido la aprobación de las leyes para la libertad para viajar a Cuba, la ley de comercio con la isla y la que prevé su desarrollo digital y de telecomunicaciones.
Amnistía instó en tanto a Obama a tener no sólo en cuenta la situación de derechos humanos en Cuba y Argentina sino también la de miles de personas migrantes y que piden asilo en Estados Unidos.
Por otra parte, AI urgió al presidente de Cuba a permitir el ingreso de organizaciones independientes de derechos humanos "en aras de la transparencia y para facilitar el monitoreo e información independientes y objetivas de diversas cuestiones de derechos humanos".
Cuestionó asimismo "detenciones arbitrarias y restricciones de la libertad de expresión, asociación y reunión" en Cuba.
El organismo le solicitó en tanto al presidente argentino que redoble los esfuerzos "por llevar ante la justicia, sin demoras, a los responsables de violaciones de derechos humanos cometidas durante el Gobierno militar (1976-1983), así como proteger la seguridad y la integridad física de los testigos en esos juicios".
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