BRUSELAS - La Unión Europea reiteró este martes su exigencia a Irán para que libere de inmediato a la Premio Nobel de la Paz 2023, Narges Mohammadi, así como a una treintena de activistas arrestados de forma arbitraria, y expresó su “profunda preocupación” por el uso sistemático de la detención como herramienta de represión política.
En un comunicado, la Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Kaja Kallas, advirtió que las autoridades iraníes recurren de manera generalizada a detenciones arbitrarias para silenciar voces críticas, una práctica que constituye una violación de las obligaciones internacionales asumidas por Teherán en el marco del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
“La Unión Europea insta a Irán a liberar a todas las personas detenidas injustamente por ejercer sus derechos fundamentales, incluida la libertad de expresión y de reunión”, señaló el bloque comunitario, que destacó la gravedad de la situación de los defensores de derechos humanos en el país.
Bruselas hizo especial referencia al caso de Narges Mohammadi, aludiendo a su delicado estado de salud y reclamando su excarcelación inmediata. Asimismo, pidió la liberación de otros defensores de derechos humanos detenidos el pasado 12 de diciembre en la ciudad de Mashhad, durante un acto en memoria del abogado disidente Josrou Alikordi, fallecido una semana antes. Según la Fiscalía local, 39 personas fueron arrestadas entonces bajo cargos de “alteración del orden público”.
"Violencia y represión"
De acuerdo con denuncias de Amnistía Internacional, durante esos arrestos las fuerzas de seguridad iraníes infligieron torturas y otros tratos crueles, incluidos golpes violentos contra Mohammadi. La familia de la activista confirmó que tuvo que ser hospitalizada en dos ocasiones como consecuencia de estas agresiones.
Narges Mohammadi pasó gran parte de los últimos 20 años de su vida en prisión y padece graves problemas de salud, incluidos múltiples infartos. En 2022 fue sometida a una cirugía de emergencia. La activista acumula al menos cinco condenas judiciales que suman 31 años de cárcel, principalmente por su papel en las protestas contra el estricto código de vestimenta impuesto por el régimen iraní.
La Unión Europea reiteró que seguirá exigiendo el respeto a los derechos humanos en Irán y el fin de la persecución contra activistas, opositores y defensores de las libertades fundamentales.
FUENTE: Con información de Europa Press