El socialismo del siglo 21 ha tenido éxito al instalarse en Bolivia con simulación de democracia. Sin ningún elemento esencial de democracia, han presentado a Bolivia como un nuevo estado plurinacional y un modelo económico hasta que la realidad ha desnudado la dictadura/narcoestado satélite de Cuba y Venezuela con explosión de pobreza e impunidad. El presidente que sea electo en la segunda vuelta marcará el futuro de Bolivia, manteniéndola en el sistema dictatorial de crimen organizado o restituyendo la Constitución de la República.
El eje de confrontación en la segunda vuelta electoral en Bolivia es CONTINUISMO, más de lo mismo, versus CAMBIO DEL SISTEMA con la restitución de la República y la democracia.
CONTINUISMO es mantener al país en el sistema impuesto por la denominada “constitución del estado plurinacional” que basada en una larga cadena de delitos, falsificaciones y masacres fue el instrumento para que el socialismo del siglo 21 con su operador Evo Morales suplante la República, ocupando los poderes públicos (Corte Suprema de Justicia, Tribunal Constitucional, Fiscalía General, Corte Nacional Electoral, Defensor del Pueblo…) a su conveniencia, destrozando la “separación e independencia de los órganos del poder público”.
La constitución plurinacional mantiene en el poder al crimen organizado, institucionaliza la dictadura/narcoestado en Bolivia y tiene hoy más de 320 presos políticos y 27.000 exiliados.
CAMBIAR EL SISTEMA, es la restitución de la Democracia y la República, la situación jurídica, constitucional y democrática a la situación anterior a suplantación constitucional. Esto es declarando vigente la Constitución de la República de Bolivia de 1994, lo que cesa de inmediato los órganos y poderes designados en el marco de la fallida constitución plurinacional y obliga al Ejecutivo y Legislativo proceder al nombramiento de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, del Tribunal Constitucional, del Fiscal General de la Nación, del Consejo de la Judicatura, del Defensor del Pueblo, de la Corte Nacional Electoral y de todos los órganos democráticos, en los términos de la Constitución de 1994. Se desarma el aparato dictatorial.
La declaración de vigencia de la Constitución Política de la República de Bolivia de 1994 es obligación del nuevo Presidente de Bolivia en el primer momento de su mandato. Se funda en el artículo 31 de la Constitución de 1994 que manda: “SON NULOS LOS ACTOS DE LOS QUE USURPEN FUNCIONES QUE LES COMPETEN, ASÍ COMO LOS ACTOS DE LOS QUE EJERZAN JURISDICCIÓN O POTESTAD QUE NO EMANE DE LA LEY”.
No se trata de un derecho de pedir nulidad o de demandarla, es una norma obligatoria y dispositiva que establece la nulidad y que el nuevo Presidente tiene la obligación de cumplir.
El iter criminis de la denominada constitución plurinacional, comprende delitos flagrantes y públicos que no pueden mantenerse impunes, salvo complicidad y encubrimiento del nuevo gobierno. Un apretado resumen prueba:
1.- La ley de reforma constitucional 2650 de 13 de abril de 2004 suplanta el artículo 232 introduciendo la “reforma total de la constitución” que no estaba contenida en la ley de necesidad de reforma y que incluye la “asamblea constituyente”, expresamente prohibida por la Constitución de la República. Esta falsedad material e ideológica da lugar al uso del instrumento falsificado con la convocatoria a Constituyente por ley de 6 de marzo de 2006 por Evo Morales.
2.- La Asamblea Constituyente que sesionaba en Sucre -repudiada por el pueblo- fue trasladada a un cuartel militar en Oruro desde donde remitió el texto de “propuesta de constitución” que no contenía la reelección continua ni los alcances del estado plurinacional, lo que dio lugar a la ley 3941 de 21 de octubre de 2008 por la que el Congreso Ordinario se “atribuye los derechos del pueblo” y modifica la ley de reforma constitucional 2650 (ya falsificada) al establecer que “Concluido el proceso constituyente y recibida la propuesta constitucional, para ser sometida a consideración del pueblo soberano, el Congreso Nacional podrá realizar los ajustes necesarios sobre la base de la voluntad popular del interés nacional, por ley especial del Congreso, aprobada por dos tercios de votos de sus miembros presentes”, de manera que la constitución plurinacional no es la presentada por la constituyente.
3.- Para imponer la constitución plurinacional frente a la defensa ciudadana, Evo Morales perpetró las masacres de la Calancha, el Porvenir, Cochabamba, hotel las Américas y más. La del Hotel las Américas está informada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Caso 13.546) que establece la responsabilidad de Morales y su régimen por los asesinatos. Más presos y exiliados políticos fueron la consecuencia de la persecución desatada para imponer la constitución plurinacional copia de las de Cuba, Venezuela, Nicaragua, que se trató de imponer en Chile donde fue rechazada.
*Abogado y Politólogo. Director del Interamerican Institute for Demcoracy
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