La rusificación putinista en Cuba es una realidad concreta, puesta a la palestra pública, 19 de mayo de 2023, por las autoridades del régimen ruso en su encuentro con la junta directiva del país castrocomunista, en La Habana, donde celebraron la presencia nacional de Rusia en el orden financiero, empresarial, la permisividad en la exoneración de aranceles, las concesiones de tierras y su sistema bancario.
En este semestre del vigente año, han viajado a Cuba, Serguéi Lavrov, canciller de Rusia; Vyacheslav Volodin, presidente de la Duma Estatal; Masksim Oreshkin, asesor económico de la Presidencia; Boris Yurievich, director del Consejo de Negocios bilateral; Igor Sechin, director ejecutivo de la corporación petrolera Rosneft; y el secretario del Consejo de Seguridad y mano derecha de Putin, el general Nikolái Pátrushev.
Los regímenes de Vladimir Putin y Castro Díaz-Canel rubricaron acuerdos de cooperación estratégica en el Foro Económico Empresarial Rusia-Cuba, con sus representantes, el viceprimer ministro ruso, Dmitri Chernyshenko y Ricardo Cabrisas, vice primer ministro y titular de Comercio Exterior e Inversiones Extranjeras de Cuba.
Los júbilos por la injerencia colonial de Rusia putinista y el entreguismo a una potencia extranjera extracontinental de Cuba castrocomunista, 19 de mayo de 2023, están muy lejos del brindis patriótico, independentista y soberano realizado por el izamiento de la Bandera Cubana en Cárdenas, Matanzas, 1850.
Hace 173 años, dos mujeres con el mismo nombre, matanceras y cubanísimas, Emilia Teurbe Tolón y Emilia Casanova, heroínas cubanas y jóvenes patriotas, brindaron por el acto independentista de la liberación y toma de Cárdenas, 19 de mayo de 1850, la primera en el exilio, Nueva York, EEUU y la otra en Matanzas, Cuba, más tarde exiliada.
El entreguismo del régimen Castro Díaz-Canel a los rusos mancilla el suelo patrio y su soberanía nacional. Dispuso en la agricultura la concesión de tierras por 30 años y la posesión de centrales azucareros, enlaces marítimos portuarios directos y la presencia de su moneda, el rublo, y las tarjetas magnéticas MIR en Cuba.
Al menos, se divulgaron 10 proyectos de inversiones rusas en la Isla: tres bancos, productos rusos libres de impuesto, modernización de la metalúrgica de la Antillana de Acero, rehabilitación de la flota aérea cubana (Il 96 y TU-204), incremento del turismo y así el régimen cubano asegura los suministros energéticos, de trigo y la flexibilización de la deuda con Rusia.
Estas inversiones rusas son después de años de la estatalización forzosa de la propiedad en Cuba. En la década de los 60, en la prensa cubana se publicó grandes titulares de la nacionalización de los bancos y 382 grandes empresas impulsadas por la revolución castrosocialista. Fue la política para la implantación práctica de ideas socialistas e imponer rápidamente el sistema comunista en Cuba.
En las páginas principales de algunos periódicos a parecieron las empresas expropiadas, entre ellas, 105 centrales azucareros, 50 fábricas textiles, 8 empresas de ferrocarril, 13 tiendas por departamento, 16 molinos arroceros, 11 tostadoras de café, 47 almacenes comerciales y 6 fábricas de leche condensada.
Las expropiaciones forzadas, enmascaradas en la nacionalización, fueron tretas de mal gusto e injustas, pues las empresas eran cubanas en su mayoría, ejemplo: 161 centrales azucareros, 121 eran de cubanos. Simplemente era la política fidelista de la estalinización comunista.
A la oposición de esa clase empresarial y emprendedora expropiada, el tirano Fidel Castro les amenazó con más mediadas de ese tipo y les dijo en un discurso: “¡Y no es lo que le podemos quitar todavía, que todavía podemos quítales unas cuantas cosas más!”.
En la primera década de revolución socialista cumplió con sus palabras de quitarles todo a todos y expropió todas las empresas, industrias, comercios, escuelas, hospitales, periódicos, emisoras de radio y televisión; por usurpar propiedad privada, la estatización llegó a los pequeños negocios, como las carretillas de vender pan con bistec, jugos naturales y batidos hasta el cajón de limpiabotas.
Lo cierto, en pocos años se comenzó a vivir la crisis estructural e inviabilidad de su sistema político económico, con una de las peores crisis económicas en la década de los 90, el período especial. Que, desde entonces hasta hoy, escasean la azúcar y la leche y no son abundantes como cuando aquellos emprendedores y empresarios privados cubanos. Por supuesto, Fidel Castro se hizo rico y multimillonario y el pueblo cubano literalmente en la miseria y el hambre.
Sin embargo, el entreguismo putinista de Díaz-Canel aún no supera al sovietismo de Fidel. Este se convirtió en un satélite soviético, guerreó por todo el mundo para imponer su sistema comunista y a Cuba la transformó en una isla base militar extranjera con la instalación de misiles ofensivos nucleares y la presencia de tropas del ejército de la Unión Soviética.
Cuba comunista es un aliado de Putin en su guerra ilegitima contra Ucrania. Bielorrusia de ambos regímenes. Los ministros de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, y de Bielorrusia, Víktor Jrenin, suscribieron en Minsk una serie de documentos que reglamentan el almacenamiento de armas nucleares tácticas rusas en territorio bielorruso.
El sistema de misiles táctico-operativos Iskander-M, capaz de usar misiles no solo en armas convencionales sino también nucleares, ya fue entregado a Bielorrusia. Algunos de los aviones bielorrusos han sido convertidos para el posible uso de armas nucleares, como los aviones de ataque Su-25. Lukashenko propuso que se unieran a la unión ruso-bielorrusa y tendrán armas nucleares.
El régimen de Castro Díaz-Canel enviará militares cubanos a recibir entrenamiento en Bielorrusia, 23/05/2023, según Valery Revenko, Jefe del Departamento de Cooperación Militar Internacional del Ministerio de Defensa de Bielorrusia.
Cuba comunista no puede poseer los misiles balísticos estratégicos y/o tácticos. Ahora es necesario tomar las medidas contra el régimen castrosocialista por los países democráticos, en especial, EEUU, Reino Unido, Canadá, Unión Europea y Latinoamérica. No después de la instalación de los cohetes ofensivos o tácticos nucleares que ni la cuarentena o bloqueo naval y aéreo hará retirar esas armas nucleares de la isla castrista y asegurará la victoria putinista para el mundo.
La directiva del Partido Comunista de Cuba (PCC) ha tomado la decisión de progresar con cuidado hacia el modelo putinista, sus objetivos son la NEP, Nueva Política Económica de Lenin y Stalin, y permitir una pequeña propiedad privada controlada por el régimen, con su sistema rígido de leyes represivas y su instrumento idóneo de muchos años de malvada experiencia, su máquina de matar: el terror de estado.
El régimen de Castro Díaz-Canel es un cadáver ideológico putrefacto, un muerto político que no lo levanta nadie, ni el famoso Dr. Frankenstein ni mucho menos, el mismísimo Vladimir Putin. Aunque los regímenes ruso y castrista ya tienen planificados la aplicación del terror de estado para abatir los anhelos de libertad del pueblo cubano. No podrán impedir los cambios hacia una Cuba libre.