“Presta el oído a todos y a pocos tu voz”. – William Shakespeare
Lo único que muestra esta reciente encuesta es el vertiginoso descenso del Partido Demócrata: sin líderes visibles, sin nada que ofrecer y con fracaso tras fracaso
“Presta el oído a todos y a pocos tu voz”. – William Shakespeare
Un nuevo sondeo político tiene a todos escandalizados.
Según la encuestadora Gallup, que es algo así como el gurú de quienes nos informan sobre las tendencias políticas de la nación, la imagen del capitalismo en Estados Unidos ha bajado al 54%. No debe sorprendernos si tomamos en cuenta la prédica de costosas universidades que gradúan a sus estudiantes endeudados y les enseñan una filosofía fracasada para enfrentar un mundo capitalista exitoso.
Son los demócratas y los independientes quienes han contribuido a este descenso. Según la encuesta, solo un 42% de los demócratas ve el capitalismo de manera favorable, mientras que los independientes lo hacen en un 51%. La visión de los republicanos se mantiene igual, con más de tres cuartas partes manteniendo una opinión positiva.
Lo que me sorprende, francamente, es que todavía creamos en las encuestas. Toda encuesta termina siendo un reflejo de predicciones, algunas certeras, otras no.
Hace menos de un año, Donald Trump ganó las elecciones con una estrepitosa victoria sobre Kamala Harris. A pesar de necesitar solo 270 votos electorales para ganar, se llevó 312. Kamala Harris obtuvo solo 226. Vale destacar que también ganó el voto popular. ¿Pero qué decían las encuestas por aquel entonces? ¿Específicamente, qué decía Gallup?
Pues Gallup nos decía que Kamala ganaba las elecciones con un 49% y Trump perdía con un 46%. Famoso epitafio. La liberalísima cadena ABC repetía algo similar. El poderoso New York Times se hacía eco de la proyectada, aunque errónea, victoria. Yahoo daba a Kamala ganadora por un 5%, y así más o menos ocurría con el resto de las encuestadoras.
¿Entonces por qué aún les creemos? La conveniencia de la encuesta actual es que sale en momentos en que un candidato, favorito de demócratas y liberales para alcalde de Nueva York, se ha declarado socialista. Y de nuevo se repite el patrón de medios liberales de utilizar encuestas para influenciar elecciones.
Lo único que muestra esta reciente encuesta es el vertiginoso descenso del Partido Demócrata: sin líderes visibles, sin nada que ofrecer y con fracaso tras fracaso. Eso sí se merece una encuesta de Gallup.
Y, como en el caso de todo fracasado, la única opción es destruir al contrincante, recurrir a la filosofía clintoniana de “enfangar las aguas” y tratar de convencer a unos cuantos de que ellos son los dueños absolutos de la verdad.
Buen método para arrastrar al público al lodazal de la desinformación. Consejo sano: no se metan en el mismo lecho político del enemigo. No se monten en el mismo tren que va cuesta abajo sin frenos por la pendiente del ridículo.
Si los republicanos y conservadores obtuvimos el triunfo en la elección de noviembre de 2024, no fue por creer en las encuestas demócratas ni por unirnos a ellos para destruir a los nuestros. Fue porque dimos un show de fuerza, valentía y unidad.
Somos mayoría, y la única forma de seguir siéndolo es defendiendo nuestros valores y a quienes nos representan dignamente, elegidos por la mayoría de los votantes. Todo lo demás es charlatanería de quienes se creen pícaros e ignorancia de los tontos útiles de siempre.