MIAMI.- El hecho de que una amplia gama de miembros del sector privado y cámaras de comercio de la Florida hayan presentado en Tallahassee un proyecto de ley como alternativa a la extensión tradicional del Medicaid y el Obamacare merece, al menos, una mirada seria de los legisladores en la capital del estado.
El plan tiene como objetivo principal brindar cobertura de seguro de salud a los residentes de bajos recursos del estado y aquellas personas que no se benefician de los programas federales.
Bajo el nombre de A Healthy Florida Works, el proyecto de ley que fue presentado el miércoles durante una sesión del Comité de Política de Salud del Senado estatal podría ser un paso en la dirección correcta en el espinoso tema de la salud de los residentes del Estado del Sol.
En cualquier caso y echando a un lado los debates que la propuesta seguramente generará, es hora de que nuestros representantes en Tallahassee pongan tras de sí diferencias partidistas y trabajen en conjunto para proveer a los residentes menos beneficiados del estado un seguro médico.
Se ha afirmado que los fondos de la iniciativa provendrían de los 40.000 millones de dólares que el Gobierno federal ya ha recibido por concepto de impuestos en el caso de los seguros de salud, los cargos impositivos por equipos médicos perdurables y la reducción de los pagos hechos a los hospitales para financiar el costo de los cuidados médicos a las personas de la tercera edad y quienes no tienen un seguro médico.
La soluciones a los grandes retos que enfrenta la salud pública en el país, y especialmente en nuestro estado, pasan por un amplio y honesto debate que ponga como primer objetivo el bienestar de nuestros ciudadanos.