jueves 28  de  marzo 2024
ECONOMÍA

La guerra del salario mínimo sobrepasa las ilusiones

Miami-Dade cuenta con ciertas normas que benefician a los trabajadores de determinadas empresas y el Gobierno condal podría equiparar el derecho al resto de la población

Días después de la visita del secretario de trabajo Thomas Pérez, a Miami-Dade, como parte de su campaña para promover el proyecto de ley que aumentaría el sueldo mínimo nacional, salta el debate sobre el efecto económico, político y social que causaría el citado incremento, si es finalmente aprobado por el Congreso de la nación.

Tras una breve reunión con líderes de grupos comunitarios y laborales, donde abordaron las necesidades económicas de quienes ganan el sueldo mínimo establecido en Florida de 8,05 dólares por hora, superior al nacional establecido de 7,25; el funcionario de la administración del presidente Barack Obama abordó la necesidad de aumentar paulatinamente la cifra, hasta llegar a 12 dólares en el año 2020.

“El camino adecuado en los negocios es también el camino inteligente”, dijo el secretario de trabajo para respaldar la tesis que relaciona la calidad del trabajo y la lealtad de los empleados con el salario que reciben para afrontar con dignidad  los gastos necesarios del diario vivir.

De hecho, según datos suministrados por el Departamento de Trabajo, un sueldo digno promueve el florecimiento económico de la empresa.

LEA TAMBIÉN: Secretario de Trabajo pide en Miami aumentar salarios

Ése es precisamente el argumento que respalda la idea que la capacidad de compra de las clases bajas aumentaría, hasta estimular el consumo que conllevaría al aumento deseado de las ventas.

Según datos suministrados por la organización no gubernamental Center for Americran Progress Action Fund (CAPAF), si el sueldo mínimo alcanzara 10.10 dólares, el impacto económico traería 1.300 millones de dólares a la economía de la Florida.

LEA TAMBIÉN: Los Ángeles sube el salario mínimo a 15 dólares la hora

No obstante, Miami Dade, donde el costo de la vivienda ocupa alrededor del 54 % de los salarios, reclamaría un aumento mayor.

Eso es precisamente lo que el grupo MIT Living Wage Calculator sustenta cuando plantea que los miamenses necesitarían ganar al menos 10.79 dólares por hora para salir airosos, luego de hacerle frente a los gastos mínimos del día.

“La economía no está funcionando bien para todos”, manifestó la directora de planeamiento de CAPAF, Anna Chu. “Tal como está ahora, parece estar estancada en favor de los que están arriba”, puntualizó.

Más tarde ilustró cómo alguien que gana 8,05 por hora en la Florida, o 16.744 dólares al año, y marcha al frente de una familia de tres miembros, forma parte del ejército de los pobres por tener que vivir con 2.000 dólares por debajo del índice de pobreza.

Otro aumento

En este apartado abundan las opiniones disímiles pero sobresale la percepción que el aumento del salario mínimo dificulta el avance de la economía porque reduce la capacidad de contratación, incrementa el desempleo y estimula la inflación.

Incluso el gobernador Rick Scott, que reconoce la carga que significa llevar las riendas de una familia para llegar al fin de mes, se muestra reacio a promover otro aumento.

El gobernador floridano, que defiende la creación de puestos de trabajo, prefiere hablar de cantidad de empleos y no de salarios.

Hace apenas unos meses, cuando optaba por la reelección, un reportero le preguntó cuál sería el sueldo mínimo justo, a lo que respondió con la pregunta: “¿Cómo habría de saberlo? El sector privado decide los salarios”.

Luego añadió: “Sólo porque [el gobierno] imponga un salario mínimo, no significa que puedas conseguir un trabajo”.

Según la publicación Pew Research, que analiza los números provenientes del Departamento de Trabajo, 1,5 millones de trabajadores que cobran por hora ganaron el mínimo federal y casi 1,8 millones ganaron menos que esa cifra porque forman parte de ciertas excepciones, como ingresos por propinas, estudiantes, trabajadores con minusvalías, entre otras.

Aunque el número suene sorprendentemente pequeño, hay que tomar en cuenta que estas cifras no incluyen a quienes ganan el salario mínimo establecido por el estado, como es el caso de la Florida, que supera el salario mínimo federal.

Según Pew Research, alrededor de 20,6 millones de personas, o sea el 30% de todos los empleados que trabajan por hora mayores de 18 años de edad, ganan entre 7,25 y 10,10 dólares por hora; colocándolos en el rango de “casi mínimo nacional”.

Mientras tanto, la Legislatura de la Florida, que figura en la muy selecta lista de los 29 estados de la Unión que superan el mínimo federal, evita tratar el tema del salario mínimo, aun cuando la opinión pública pide abordar el asunto otra vez.

Por otra parte, Miami-Dade, cuya administración condal ya cuenta con normas que regulan el sueldo mínimo que las empresas que trabajan para el Condado pagan a sus empleados, 14,27 si no proveen seguro médico o 12,46 si lo facilitan; podría dotar al resto de la población con un beneficio similar.

Ciudades como Seattle, Nueva York, San Francisco y Los Angeles han adoptado unas cifras superiores a las que fueron planteadas por sus respectivos estados para facilitar los gastos que suponen el alto costo de la vida.

“No hay efectos perceptibles” que atenten contra la salud de la economía, aseguró el Departamento de Trabajo, tras dar a conocer los resultados de medio centenar de estudios.

LEA TAMBIÉN: Trabajadores domésticos en Miami reclaman salarios más altos y un sindicato

¡Recibe las últimas noticias en tus propias manos!

Descarga LA APP

Deja tu comentario

Te puede interesar